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Pero yo enfocaría este tema desde otro punto de vista ¿Porque un estado ha de tener capital? Y, caso de tenerla ¿Porque tiene que tener una localización "fija" en vez de ir rotando de ciudad en ciudad? La segunda pregunta es bastante sencilla de responder motivadamente, pero la primera no lo veo yo muy claro (que no veo claro la necesidad de la existencia de una capital, vaya).
Muchos países han optado por capitalizar una ciudad de importancia secundaria (Washington, Brasilia, etc.) evitándose así que una ciudad grande prevalezca políticamente sobre las demás.
Pues bien, como dije, en el debate Rajoy dijo eso de "La unidad es algo que viene de antes de la Constitución y que debemos preservar por encima de todo". El muro ya no es la legalidad, ni la española ni la europea ni ninguna, el muro es la esencia misma del nacionalismo español, es la unidad de su proyecto nacional... son los Reyes Católicos, las reconquistas, Recaredo y hasta Viriato, que diría Esperanza Aguirre. Ríete tú de los nacionalistas serbios o rusos cuando aquí tenemos un discurso de ese calibre por parte del partido del gobierno.
Tú partes dogmáticamente de la existencia de una nación catalana soberana y otros partimos de la existencia de una nación española. Estamos empatados.
Pues bien, como dije, en el debate Rajoy dijo eso de "La unidad es algo que viene de antes de la Constitución y que debemos preservar por encima de todo". El muro ya no es la legalidad, ni la española ni la europea ni ninguna, el muro es la esencia misma del nacionalismo español, es la unidad de su proyecto nacional... son los Reyes Católicos, las reconquistas, Recaredo y hasta Viriato, que diría Esperanza Aguirre. Ríete tú de los nacionalistas serbios o rusos cuando aquí tenemos un discurso de ese calibre por parte del partido del gobierno.
Tú partes dogmáticamente de la existencia de una nación catalana soberana y otros partimos de la existencia de una nación española. Estamos empatados.
Un saludo
Totalmente, sólo pido entonces que así como yo debo reconocerme como nacionalista, también se reconozcan como nacionalistas aquellos que ponen la unidad de España, y su mantenimiento por encima de las leyes y las voluntades, como nacionalistas, para decirlo de un modo suave.
Lo que no es de recibo, ni racional, es que en un país que va de democrático y en que ser independentista es teóricamente "legítimo", el presidente del Gobierno diga que el muro a salvar ya no es ni la Carta Magna, sino que es más que eso, es una unidad incuestionable, algo a preservarse por encima de las leyes.
Totalmente, sólo pido entonces que así como yo debo reconocerme como nacionalista, también se reconozcan como nacionalistas aquellos que ponen la unidad de España, y su mantenimiento por encima de las leyes y las voluntades, como nacionalistas, para decirlo de un modo suave.
Lo que no es de recibo, ni racional, es que en un país que va de democrático y en que ser independentista es teóricamente "legítimo", el presidente del Gobierno diga que el muro a salvar ya no es ni la Carta Magna, sino que es más que eso, es una unidad incuestionable, algo a preservarse por encima de las leyes.
Eso es nacionalismo del más extremo.
Vale, ¿y?. Tú también pones tú nacionalismo sobre las voluntades de los españoles no catalanes. Sobre las leyes en cambio la soberanía española es la legal y la regional no lo es. Así que llegamos a lo mismo, son dos proyectos políticos incompatibles y la decisión sobre cual prima no puede ser democrática.
Totalmente, sólo pido entonces que así como yo debo reconocerme como nacionalista, también se reconozcan como nacionalistas aquellos que ponen la unidad de España, y su mantenimiento por encima de las leyes y las voluntades, como nacionalistas, para decirlo de un modo suave.
Lo que no es de recibo, ni racional, es que en un país que va de democrático y en que ser independentista es teóricamente "legítimo", el presidente del Gobierno diga que el muro a salvar ya no es ni la Carta Magna, sino que es más que eso, es una unidad incuestionable, algo a preservarse por encima de las leyes.
Eso es nacionalismo del más extremo.
Vale, ¿y?. Tú también pones tú nacionalismo sobre las voluntades de los españoles no catalanes. Sobre las leyes en cambio la soberanía española es la legal y la regional no lo es. Así que llegamos a lo mismo, son dos proyectos políticos incompatibles y la decisión sobre cual prima no puede ser democrática.
Un saludo
Nacionalismo expansivo vs Nacionalismo reactivo.
Yo no voy a decir que Mallorca es parte de la "nación catalana" contra la voluntad de los mallorquines. Y lo contrario sí pasa, nacionalistas españoles decidiendo que Cataluña no sólo no es ni será una nación ni un sujeto soberano, sino que de ésta su nación no se pira nadie.
Debería primar la voluntad democrática de los ciudadanos del territorio en cuestión, por más que el nacionalismo español insista en que NO somos sujeto de nada, somos cuatro provincias más de SU proyecto nacional y la voluntad que debe primar es la del todo, uno e indivisible.
Yo no voy a decir que Mallorca es parte de la "nación catalana" contra la voluntad de los mallorquines. Y lo contrario sí pasa, nacionalistas españoles decidiendo que Cataluña no sólo no es ni será una nación ni un sujeto soberano, sino que de ésta su nación no se pira nadie.
Debería primar la voluntad democrática de los ciudadanos del territorio en cuestión, por más que el nacionalismo español insista en que NO somos sujeto de nada, somos cuatro provincias más de SU proyecto nacional y la voluntad que debe primar es la del todo, uno e indivisible.
Bueno, ya se sabe que un sector del nacionalismo catalán (minoritario) también es expansivo hacia Baleares y Valencia.
Por lo demás el que un nacionalismo sea más débil que el otro no le da mayor legitimidad, más bien es un defecto.
Y nuevamente vuelves a partir de la soberanía regional porque a ti te parece la legítima, cosa totalmente discutible desde los nacionalismos de otras escalas.
Briz, creo que la comparación adecuada sería si, por ejemplo, con la postura que un nacionalista catalán tendría si Tarragona se quisiera independizar de una Cataluña independiente. Hoy por hoy, evidentemente, entraríamos en el campo de la ficción.
Briz, creo que la comparación adecuada sería si, por ejemplo, con la postura que un nacionalista catalán tendría si Tarragona se quisiera independizar de una Cataluña independiente. Hoy por hoy, evidentemente, entraríamos en el campo de la ficción.
De hecho podrían existir perfectamente nacionalismos fuertes a nivel provincial o local si se hubiera formado un movimiento nacionalista exitoso a esas escalas. Y desde luego podrían declararse entidades soberanas con tanta legitimidad como lo hace el nacionalismo regional o el estatal.
Pero sí creo que Mas está en un callejón sin salida. Algunos quieren hacer lo mismo que se hizo hace ochenta años: declarar unilateralmente la independencia por la vía ilegal. Pero hoy el mundo ha cambiado y esto supondría un aislamiento de Cataluña en Europa y un grave problema para España. Y Mas sabe que para que los que quieren la independencia a toda costa no ganen las elecciones debe ganar él la batalla. Y para ganar debe pactar y sacar tajada. Pero, ¿cómo va a hacerlo con un presidente de España que se niega rotundamente al diálogo mientras no se abandone la vía catalana? Lo que no sé es hasta dónde están dispuestos a arriesgar Mas y Rajoy, o Rajoy y Mas en su obcecación, porque mientras tanto se está gestando aquello que ninguno de los dos desea: gobierno de radicales ERC + CUP, o sea, el terror.
Tan alejado de la realidad como puede un artículo ser. Este hombre tan formado necesita pasar un trimestre en Cataluña y recoger opiniones y empaparse de la realidad catalana antes de ir dando lecciones de sociología básica.
De verdad Tarrou, que estos artículos de crítica de la paja en el ojo ajeno, sin apreciar la viga en el propio, no sé a qué nos llevarán, en un problema que es real, que no es nuevo ni desconocido, y que va a más porque el proyecto identitario y nacional español, cada vez difiere más del proyecto nacional, también identitario en buena medida, catalán... o vasco.
Es un problema político español, y debería ser encarado por políticos de altura, y quizás podría solucionarse. Pero no, se gastan ríos de tinta para intentar seguir esquivando la realidad. Decir que esto es un invento del político tarado de turno (sea Companys, Pujol, Maragall, Montilla, Carod o ahora Mas), que la ciudadanía es manipulada y engñada, que aquí se usa la identidad más que en otros sitios, etc, etc... no son más que las excusas de siempre para evitar encarar y solventar un tema que el proyecto identitario y nacional español se niega a aceptar y solventar, por miedo a perder su preponderancia en la organización, gestión, administración y RECAUDACIÓN dentro de un Estado que es mucho más plural y diverso de lo que se insiste en reconocer a través de su organización política y administrativa.
En fin. Más tinta para tapar vergüenzas. Y la gente que conoce escasamente Cataluña hace que sí con la cabeza, se conforma con leer eso y bueno, otro día que pasa.
Creo que no es incompatible, Breathe. Creo que si una mayoría de ciudadanos lo desean debe articularse un proceso que eventualmente pueda conducir a la secesión, que España es un país tradicionalmente esencialista e intolerante y que deberíamos tratar de entender los motivos que mueven a los ciudadanos cansados de este modelo.
Pero también me parece que el artículo acierta de lleno desmontando (a mi entender con acierto) las falacias sobre las que se articula un andamiaje pernicioso para la ciudadanía.
Ya sabes que es un placer siempre debatir contigo, aunque no coincidamos casi nada a veces. Gracias por el tono de la respuesta
Creo que no es incompatible, Breathe. Creo que si una mayoría de ciudadanos lo desean debe articularse un proceso que eventualmente pueda conducir a la secesión, que España es un país tradicionalmente esencialista e intolerante y que deberíamos tratar de entender los motivos que mueven a los ciudadanos cansados de este modelo.
Pero también me parece que el artículo acierta de lleno desmontando (a mi entender con acierto) las falacias sobre las que se articula un andamiaje pernicioso para la ciudadanía.
Ya sabes que es un placer siempre debatir contigo, aunque no coincidamos casi nada a veces. Gracias por el tono de la respuesta
No acierta porque apunta sólo en una dirección en vez de extender al todo el problema.
En Cataluña hay independentistas que se llaman Pérez Martínez, y ultras españolistas que se llaman Vidal-Quadras Roca. La "identidad" catalana no es de definición fácil, no tiene en cuenta el origen, el apellido o el idioma materno. Quizás el catalanismo de hace 100 años se sustentaba en el idioma porque tras siglo y medio de prohibición y marginación, había la necesidad de volver a dotar de salud el idioma propio del 90% de ciudadanos del país, pero ahora?
Ahora es todo bastante distinto, el catalanismo no se sustenta en el idioma catalán, sino en el bilingüismo o el equilibrio entre catalán y castellano en nuestra sociedad, se sustenta también en caminar hacia un mayor autogobierno en busca de eficiencia y eficacia, y se sustenta en proteger las instituciones propias y las competencias que creemos que podemos y debemos gestionar desde aquí sin intromisión de Madrid. ¿Eso es identitarismo? Para mi no.
Como es obvio, y como te comento, hay catalanes de segunda generación cuya identidad es plenamente catalana y no se sienten españoles, y en cambio hay catalanes de toda la vida cuya identidad es plenamente española, como pasa en decenas de países en que hay identidades conviviendo.
El problema del artículo es decir que eso, el uso de la identidad, pasa casi-exclusivamente en Cataluña, cuando no es cierto. Y no sólo no es cierto sino que en nombre de la identidad española, de la unidad de la nación española, se han cometido auténticas atrocidades contra otras lenguas, otras formas de pensar, otros sentimientos nacionales y otras banderas... Hoy día mismo tenemos a un presidente con mayoría absoluta que proclama que "aquí sólo existe una identidad, la española", o que "hay algo superior a la Constitución que debe preservarse, la unidad de la nación".
España es eso, un estado tremendamente nacionalista e identitario, que evidentemente provoca movimientos reactivos en lugares que no acaban de cuajar con ese proyecto nacional tan expansivo, como en Euskadi o Cataluña... pero que después no reconoce sus defectos ni sus problemas, soltando artículos donde parece que el tema identitario o la manipulación de la historia es un problema de los demás. Y eso no sólo no es justo, sino que a mi me parece bastante patético.
La nación española del siglo XXI ya está muy marcadamente definida y en ella no cabemos muchos catalanes y muchos vascos, eso es un hecho y cuanto antes se encare, para mi mejor. Hubo ideas para caber en vuestra nación española, desde Cataluña se han promovido las dos Repúblicas españolas y los Estatutos de Autonomía, se ha apostado siempre por una España más plural, pero el germen implantado tras 1714 ha cuajado, y en la nación española, definitivamente pancastellana y cerrada a la pluralidad real del Estado, yo te aseguro que ya no se cabrá.
El tema es analizar desde la alta política si España tiene recorrido y sentido como Estado plurinacional y federal, que puede que sí, sin que haga falta retocar la definición de lo que es ser nacionalista o patriota español, o si seguir insistiendo en lo de única nación y seguir apostando por asimilar a los que quedamos sin asumir esa identidad española diseñada y alimentada desde la metrópoli, catalanes y vascos y algunos gallegos, cosa que nos seguirá llevando a frustraciones y a piques periódicos... o bueno, si cortar de raíz y separarse.
Mi opinión es que seguir escribiendo artículos en que los ilustres de una nación única y tan identitaria e intolerante con la pluralidad como España, llaman nacionalistas e identitarios a los otros, es cansino y no soluciona ni conduce más que al auto-comepollismo. Pero sólo es mi opinión.
Sin hacer tanto ruido como ocurrió en la época del pérfido Ánsar, el gobierno español de este PP que es más callado pero más viperino, ha presentado un nuevo Plan del Ebro en el que vuelve a hacer las cosas sin consultar con casi nadie, y choca frontalmente con el gobierno catalán.
La Generalitat pedía que llegase un caudal ecológico de 7000 hectómetros cúbicos al año al Delta del Ebro, para parar el avance del mar y la desalinización del delta, y así asegurar su continuidad, la de sus cultivos, siendo como es reserva de la biosfera. Esa cantidad de sustenta en estudios científicos y técnicos, de especialistas y ecologistas.
El Gobierno de España y Arias Cañete se comprometen en su plan a un caudal de 3000 hectómetros cúbicos, ampliable a 3300 hm3 anuales llegando al Delta. Volvemos a la guerra del agua del Ebro, pero esta vez Arias Cañete promete más agua a los regantes de Lleida y Zaragoza, es decir, más hectáreas de regadío, tentándolos así para que estén contentos y no hagan frente común con la gente de Tarragona.
Para el PP, como siempre, mejor producir y exportar más melocotones, aunque por ello se seque y salinice un delta que es un ecosistema único y reserva de la biosfera.
Una hipótesis sobre el surgimiento del nacionalismo catalán frente al nacionalismo español. No es nada que no se haya explicado mil veces por aquí (debilidad del estado español en un momento clave) pero está bien explicado y tiene el interés de venir de académicos de primer nivel.
Most of the research by economists on the state has focused on a quite narrow subset of things the state does. For example, Daron’s paper “Politics and Economics in Weak and Strong States” on the ability to raise taxes as the key dimension of whether a state was weak or strong. This was subsequently a key theme in the 2011 book Pillars of Prosperity by Tim Besley and Torsten Persson who focused on the development of fiscal systems to raise taxes and legal institutions to efficiently enforce contracts.
In our work with Rafael Santos on Colombia, “Monopoly of Violence: Evidence from Columbia”, we focused on the creation of a monopoly of violence. (We will also soon report on some other new work of ours on the economic consequences of state capacity and state building).
But all of this research ignores one of the most fundamental things that modern states do — to create a national identity eliminating alternative identities.
One of the reasons, for example, that modern Tunisia is so different from neighboring Libya is that after independence the first president, Habib Bourguiba, invested heavily in creating a national identity. Instead, the rulers of Libya, such as Muammar Gaddafi, exploited and exacerbated different identities as a way to stay in power.
Modern states obviously differ a lot in how successful they have been at creating national identities, with huge consequences, as the previous example shows (it is Libya, not Tunisia, that is tottering on the verge of civil war at the moment). This is even true within Europe, a place that we tend to think of as having very successful consolidated nation states. Take the case of Spain and France. Though some people in the southwest of France still speak Occitan and grumble about being controlled from Paris, the reality is that the French state did a very effective job at forging a national identity (the locus classicus on this process is the 1976 book Peasants into Frenchmen by Eugen Weber which we mentioned in an earlier post, where we discussed why the English had been so bad at obliterating the identity of the Scots – who may ungratefully declare independence this year).
In recent research Laia Balcells, a political science professor at Duke University, has investigated the differences between Catalans south of the Spanish border and those north. In her paper “Mass Schooling and Catalan Nationalism”, she points out that Catalunya was split between France and Spain by a treaty in 1659. The Catalans had a distinct history with their own language yet the extent to which people identify as Catalan today differs greatly north and south of the border.
In Spanish Catalonia, Balcells shows that Catalan is the main language of communication between members of the family for 37% of the population; also, 7% say that Catalan is not the only language, but that it is more usual than Spanish.
In French Catalonia, in contrast, only 0.5% of the population speaks Catalan within the family: French is the main language in family communications for 87.6% of the population. This use of language is one way of seeing the different facts about identity.
The question then is this: why is there this divergence with Catalans in Spain currently demanding a referendum on becoming an independent country while nothing of the sort is taking place in France?
At some loose level this is obviously connected with what Eugene Weber was writing about. The French created a very effective top down state and socialized everyone into being French, particularly through the educational system where French was the only language which could be used.
Balcells does not dispute this claim but makes a more subtle argument. She puts it in the context of “nationalistic revivals” which take place in three phrases:
Phase A which she calls “scholarly interest” led by intellectuals who discover and celebrate some lost or repressed identity
Phase B which she describes as “patriotic agitation” where people become much more aware of the issues and more general nationalists sentiments surface;
Phase C, finally, is the “rise of a mass movement” where collective action for national recognition and even independence takes place.
Balcells’ argument is that what is critical is the interaction between these social dynamics and what she calls, following the terminology of political scientist Keith Darden, a “scholastic revolution”. This corresponds to the first generation of people to receive mass education and when a community first shifts from an oral to a literate mass culture. The important point about France was that the strong state was around at the time of the scholastic revolution that meant that Catalan nationalistic sentiments got no air time in school.
In Spain, where the central state had not effectively exerted itself in the periphery, mass schooling arrived at just the moment when Phase B was in full flow. In consequence the state could not control the teaching of Catalan nationalism in school. Hence the first generation of people who received schooling was socialized into being highly sympathetic to the cause of Catalan nationalism. In Darden’s view the “scholastic revolution” is a “critical juncture” in identity formation that then massively persists over time even in the face of efforts to repress it. Balcells shows this is precisely what happened in Catalonia during the dictatorship of Franco.
The critical factor causing the divergence between the north and south of the French-Spain border in terms of Catalan nationalism was that the Spanish state was weak at exactly the wrong time — when the scholastic revolution interacted with a wave of patriotic agitation.
No jodamos que sigue hablando del adoctrinamiento escolar...
Y encima comparando la sociedad catalana norpirenaica, que quedó aislada de Barcelona y que carecía de burguesía que asegurara la manutención del idioma y de la cultura... con la sociedad surcatalana de los últimos 3 siglos.
En serio, no sé qué necesidad hay de leer artículos de gente que no conoce ni pisa ni vive ni ES catalana, si el problema sigue ahí y el nacionalismo español lleva demasiado tiempo queriéndolo negar y huir hacia adelante.
Comentarios
Muchos países han optado por capitalizar una ciudad de importancia secundaria (Washington, Brasilia, etc.) evitándose así que una ciudad grande prevalezca políticamente sobre las demás.
Tú partes dogmáticamente de la existencia de una nación catalana soberana y otros partimos de la existencia de una nación española. Estamos empatados.
Un saludo
Totalmente, sólo pido entonces que así como yo debo reconocerme como nacionalista, también se reconozcan como nacionalistas aquellos que ponen la unidad de España, y su mantenimiento por encima de las leyes y las voluntades, como nacionalistas, para decirlo de un modo suave.
Lo que no es de recibo, ni racional, es que en un país que va de democrático y en que ser independentista es teóricamente "legítimo", el presidente del Gobierno diga que el muro a salvar ya no es ni la Carta Magna, sino que es más que eso, es una unidad incuestionable, algo a preservarse por encima de las leyes.
Eso es nacionalismo del más extremo.
Vale, ¿y?. Tú también pones tú nacionalismo sobre las voluntades de los españoles no catalanes. Sobre las leyes en cambio la soberanía española es la legal y la regional no lo es. Así que llegamos a lo mismo, son dos proyectos políticos incompatibles y la decisión sobre cual prima no puede ser democrática.
Un saludo
Nacionalismo expansivo vs Nacionalismo reactivo.
Yo no voy a decir que Mallorca es parte de la "nación catalana" contra la voluntad de los mallorquines. Y lo contrario sí pasa, nacionalistas españoles decidiendo que Cataluña no sólo no es ni será una nación ni un sujeto soberano, sino que de ésta su nación no se pira nadie.
Debería primar la voluntad democrática de los ciudadanos del territorio en cuestión, por más que el nacionalismo español insista en que NO somos sujeto de nada, somos cuatro provincias más de SU proyecto nacional y la voluntad que debe primar es la del todo, uno e indivisible.
Bueno, ya se sabe que un sector del nacionalismo catalán (minoritario) también es expansivo hacia Baleares y Valencia.
Por lo demás el que un nacionalismo sea más débil que el otro no le da mayor legitimidad, más bien es un defecto.
Y nuevamente vuelves a partir de la soberanía regional porque a ti te parece la legítima, cosa totalmente discutible desde los nacionalismos de otras escalas.
Un saludo
país de risa... por dios...
Ha tenido que trabajar muy duro pa comprarse tantos.
Un verdadero hijodeputa.
De hecho podrían existir perfectamente nacionalismos fuertes a nivel provincial o local si se hubiera formado un movimiento nacionalista exitoso a esas escalas. Y desde luego podrían declararse entidades soberanas con tanta legitimidad como lo hace el nacionalismo regional o el estatal.
Un saludo
Está Mas desbordado por la situación que él mismo ha generado?
Enviado desde mi GT-S7580 mediante Tapatalk
Y tú le estás dando credibilidad a Sostres??
No.
Pero sí creo que Mas está en un callejón sin salida. Algunos quieren hacer lo mismo que se hizo hace ochenta años: declarar unilateralmente la independencia por la vía ilegal. Pero hoy el mundo ha cambiado y esto supondría un aislamiento de Cataluña en Europa y un grave problema para España. Y Mas sabe que para que los que quieren la independencia a toda costa no ganen las elecciones debe ganar él la batalla. Y para ganar debe pactar y sacar tajada. Pero, ¿cómo va a hacerlo con un presidente de España que se niega rotundamente al diálogo mientras no se abandone la vía catalana? Lo que no sé es hasta dónde están dispuestos a arriesgar Mas y Rajoy, o Rajoy y Mas en su obcecación, porque mientras tanto se está gestando aquello que ninguno de los dos desea: gobierno de radicales ERC + CUP, o sea, el terror.
Menudo artículo para uso y disfrute de la caverna! XD!
Es genial.
Sí, ya imagino que habrás disfrutado bastante.
Un saludo
Me parece excelente.
Tan alejado de la realidad como puede un artículo ser. Este hombre tan formado necesita pasar un trimestre en Cataluña y recoger opiniones y empaparse de la realidad catalana antes de ir dando lecciones de sociología básica.
De verdad Tarrou, que estos artículos de crítica de la paja en el ojo ajeno, sin apreciar la viga en el propio, no sé a qué nos llevarán, en un problema que es real, que no es nuevo ni desconocido, y que va a más porque el proyecto identitario y nacional español, cada vez difiere más del proyecto nacional, también identitario en buena medida, catalán... o vasco.
Es un problema político español, y debería ser encarado por políticos de altura, y quizás podría solucionarse. Pero no, se gastan ríos de tinta para intentar seguir esquivando la realidad. Decir que esto es un invento del político tarado de turno (sea Companys, Pujol, Maragall, Montilla, Carod o ahora Mas), que la ciudadanía es manipulada y engñada, que aquí se usa la identidad más que en otros sitios, etc, etc... no son más que las excusas de siempre para evitar encarar y solventar un tema que el proyecto identitario y nacional español se niega a aceptar y solventar, por miedo a perder su preponderancia en la organización, gestión, administración y RECAUDACIÓN dentro de un Estado que es mucho más plural y diverso de lo que se insiste en reconocer a través de su organización política y administrativa.
En fin. Más tinta para tapar vergüenzas. Y la gente que conoce escasamente Cataluña hace que sí con la cabeza, se conforma con leer eso y bueno, otro día que pasa.
Pero también me parece que el artículo acierta de lleno desmontando (a mi entender con acierto) las falacias sobre las que se articula un andamiaje pernicioso para la ciudadanía.
Ya sabes que es un placer siempre debatir contigo, aunque no coincidamos casi nada a veces. Gracias por el tono de la respuesta
No acierta porque apunta sólo en una dirección en vez de extender al todo el problema.
En Cataluña hay independentistas que se llaman Pérez Martínez, y ultras españolistas que se llaman Vidal-Quadras Roca. La "identidad" catalana no es de definición fácil, no tiene en cuenta el origen, el apellido o el idioma materno. Quizás el catalanismo de hace 100 años se sustentaba en el idioma porque tras siglo y medio de prohibición y marginación, había la necesidad de volver a dotar de salud el idioma propio del 90% de ciudadanos del país, pero ahora?
Ahora es todo bastante distinto, el catalanismo no se sustenta en el idioma catalán, sino en el bilingüismo o el equilibrio entre catalán y castellano en nuestra sociedad, se sustenta también en caminar hacia un mayor autogobierno en busca de eficiencia y eficacia, y se sustenta en proteger las instituciones propias y las competencias que creemos que podemos y debemos gestionar desde aquí sin intromisión de Madrid. ¿Eso es identitarismo? Para mi no.
Como es obvio, y como te comento, hay catalanes de segunda generación cuya identidad es plenamente catalana y no se sienten españoles, y en cambio hay catalanes de toda la vida cuya identidad es plenamente española, como pasa en decenas de países en que hay identidades conviviendo.
El problema del artículo es decir que eso, el uso de la identidad, pasa casi-exclusivamente en Cataluña, cuando no es cierto. Y no sólo no es cierto sino que en nombre de la identidad española, de la unidad de la nación española, se han cometido auténticas atrocidades contra otras lenguas, otras formas de pensar, otros sentimientos nacionales y otras banderas... Hoy día mismo tenemos a un presidente con mayoría absoluta que proclama que "aquí sólo existe una identidad, la española", o que "hay algo superior a la Constitución que debe preservarse, la unidad de la nación".
España es eso, un estado tremendamente nacionalista e identitario, que evidentemente provoca movimientos reactivos en lugares que no acaban de cuajar con ese proyecto nacional tan expansivo, como en Euskadi o Cataluña... pero que después no reconoce sus defectos ni sus problemas, soltando artículos donde parece que el tema identitario o la manipulación de la historia es un problema de los demás. Y eso no sólo no es justo, sino que a mi me parece bastante patético.
La nación española del siglo XXI ya está muy marcadamente definida y en ella no cabemos muchos catalanes y muchos vascos, eso es un hecho y cuanto antes se encare, para mi mejor. Hubo ideas para caber en vuestra nación española, desde Cataluña se han promovido las dos Repúblicas españolas y los Estatutos de Autonomía, se ha apostado siempre por una España más plural, pero el germen implantado tras 1714 ha cuajado, y en la nación española, definitivamente pancastellana y cerrada a la pluralidad real del Estado, yo te aseguro que ya no se cabrá.
El tema es analizar desde la alta política si España tiene recorrido y sentido como Estado plurinacional y federal, que puede que sí, sin que haga falta retocar la definición de lo que es ser nacionalista o patriota español, o si seguir insistiendo en lo de única nación y seguir apostando por asimilar a los que quedamos sin asumir esa identidad española diseñada y alimentada desde la metrópoli, catalanes y vascos y algunos gallegos, cosa que nos seguirá llevando a frustraciones y a piques periódicos... o bueno, si cortar de raíz y separarse.
Mi opinión es que seguir escribiendo artículos en que los ilustres de una nación única y tan identitaria e intolerante con la pluralidad como España, llaman nacionalistas e identitarios a los otros, es cansino y no soluciona ni conduce más que al auto-comepollismo. Pero sólo es mi opinión.
http://www.lavanguardia.com/politica/20140304/54402006130/govern-denunciara-ue-plan-hidrologico-ebro.html
http://www.lavanguardia.com/politica/20140304/54402006130/govern-denunciara-ue-plan-hidrologico-ebro.html
http://www.lavanguardia.com/politica/20140304/54402006130/govern-denunciara-ue-plan-hidrologico-ebro.html
http://www.elperiodico.com/es/noticias/medio-ambiente/generalitat-denunciara-plan-del-ebro-ante-union-europea-3155749
http://www.elperiodico.com/es/noticias/medio-ambiente/generalitat-denunciara-plan-del-ebro-ante-union-europea-3155749
http://www.elperiodico.com/es/noticias/medio-ambiente/generalitat-denunciara-plan-del-ebro-ante-union-europea-3155749
Sin hacer tanto ruido como ocurrió en la época del pérfido Ánsar, el gobierno español de este PP que es más callado pero más viperino, ha presentado un nuevo Plan del Ebro en el que vuelve a hacer las cosas sin consultar con casi nadie, y choca frontalmente con el gobierno catalán.
La Generalitat pedía que llegase un caudal ecológico de 7000 hectómetros cúbicos al año al Delta del Ebro, para parar el avance del mar y la desalinización del delta, y así asegurar su continuidad, la de sus cultivos, siendo como es reserva de la biosfera. Esa cantidad de sustenta en estudios científicos y técnicos, de especialistas y ecologistas.
El Gobierno de España y Arias Cañete se comprometen en su plan a un caudal de 3000 hectómetros cúbicos, ampliable a 3300 hm3 anuales llegando al Delta. Volvemos a la guerra del agua del Ebro, pero esta vez Arias Cañete promete más agua a los regantes de Lleida y Zaragoza, es decir, más hectáreas de regadío, tentándolos así para que estén contentos y no hagan frente común con la gente de Tarragona.
Para el PP, como siempre, mejor producir y exportar más melocotones, aunque por ello se seque y salinice un delta que es un ecosistema único y reserva de la biosfera.
Un saludo
http://whynationsfail.com/blog/2014/3/4/whats-the-problem-with-spanish-catalunya.html
Y encima comparando la sociedad catalana norpirenaica, que quedó aislada de Barcelona y que carecía de burguesía que asegurara la manutención del idioma y de la cultura... con la sociedad surcatalana de los últimos 3 siglos.
En serio, no sé qué necesidad hay de leer artículos de gente que no conoce ni pisa ni vive ni ES catalana, si el problema sigue ahí y el nacionalismo español lleva demasiado tiempo queriéndolo negar y huir hacia adelante.