Carrera presidencial yanki

Ajojenjo

Patroclo escribió : »

La inflación es el motivo número 1 esgrimido por parte de los electores, la inmigración el segundo. Los datos macro en EEUU son positivos, pero las familias sufren. En Europa sucede lo mismo. En España este gobierno caerá por este motivo. La gente se empobrece y vota aquello que cree que le va a favorecer.

Creo que todos hemos visto el gráfico de percepción económica en función de sí eres republicano o demócrata y como desde la era Trump varían completamente en función de quien este en el poder.



La gente se empobrece en función de quien votas o lo que lee ve en los medios, esa es la realidad. Por eso hay cada vez más diferencia entre la situación economica personal y la situación economica percibida en las encuestas.

Sé que esto no gusta a los mismos que niegan la existencia de los bulos, pero es la realidad, cada vez más vivimos en mundos polarizados donde la realidad que vive tu vecino es completamente distinta a la tuya. El grafico que pongo es un ejemplo, pero nos pasa todo el rato con todo.

Patroclo

Yo no había visto este gráfico, gracias por compartirlo. En parte tiene sentido que en una encuesta política los encuestados valoren mejor todo (de media) si gobiernan los suyos. Pero fuera de esa población polarizada, que sí o sí votaría por Trump, que sí o sí votaría por Harris, que sí o si odia a todos y no votaría jamás por nadie, hay un porcentaje pequeño que decide las elecciones, que puso a Trump, luego puso a Biden y ahora vuelve a poner a Trump. Ese pequeño equilibrio que decanta la balanza a un lado o al otro suele determinarlo la situación económica. Yo creo que sin inflación y con un hombre moderado de candidato, como Biden pero que no se tambalee, los demócratas hubiesen ganado estas elecciones.

Incluso el discurso anti-inmigración es económico (Americans first, America first). Y la realidad es que por mucho que las economías vayan "como un cohete" en lo macro, las familias de clase trabajadora en los últimos 15 años se han empobrecido a lo bestia. No como en 1929, pero lo suficiente como para que haya consecuencias sociopolíticas que vuelven a poner en peligro el orden democrático.