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Cojamos un Convenio. Y de todas las interpretaciones posibles, de todas sus implementaciones posibles, hacemos la menos ambiciosa posible.
Si por algunos fuera, España acababa convirtiéndose en Polonia. Suerte que de momento sólo por algunos, una minoría que hoy tiene 52 representantes en el Parlamento.
Si no discriminas a la gente pos su sexo y su orientacion sexual eres nazi.
Sigo esperando tu solución política a un problema de desigualdad de género sin tener en cuenta el género. Por los siglos de los siglos.
Igualdad ante la ley y educación para la misma. Discriminar por genero y orientación sexual en la ley no es solución a nada si no fomentar la normalización de la discriminacion por género y orientación sexual.
No hay forma de CORREGIR una desigualdad sin tener en cuenta el factor de tal desigualdad, es decir, discriminando por ese factor.
Las discriminaciones positivas (sí, positivas), han de ser temporales mientras se corrige la injusticia.
Si quieres abordarlo solo desde la educación (dejando en la estacada a las generaciones presentes de mujeres y preocupándote sólo de las futuras), vas a tener que discriminar igual. A los niños y niñas les vas a tener que decir que sus madres, por ser mujeres, no han de encargarse ni más ni menos que sus padres, por ser hombres, de las tareas del hogar y los cuidados. Vas a tener que dar una formación distinta a niños y niñas en tanto a que a ellas las vas a tener que preparar para protegerse de la discriminación que sufre su género, y a los niños a no adoptar el rol machista que ven en las generaciones de sus padres y abuelos.
Los argumentos de Diego se podrían resumir con aquella frase de la estalinista Dolores Ibárruri que decía que es preferible condenar a cien inocentes antes que poner en libertad a un culpable.
Pero en esencia se traduce en que se va a atacar al consenso ahora que no gobierna la derecha, porque evidentemente la LIVG es discriminación positiva aceptada por todas las partes (menos Vox que no pintaba nada en al 2004).
Pero en esencia se traduce en que se va a atacar al consenso ahora que no gobierna la derecha, porque evidentemente la LIVG es discriminación positiva aceptada por todas las partes (menos Vox que no pintaba nada en al 2004).
Te iba a decir que ese enlace corrobora la cita, pero... ¿acaso alguna vez enlazas algo que te dé la razón?
No hay forma de CORREGIR una desigualdad sin tener en cuenta el factor de tal desigualdad, es decir, discriminando por ese factor.
Si lo hay. Con leyes que traten a todos igual y vom educacion.
Las discriminaciones positivas (sí, positivas), han de ser temporales mientras se corrige la injusticia.
Si quieres abordarlo solo desde la educación (dejando en la estacada a las generaciones presentes de mujeres y preocupándote sólo de las futuras), vas a tener que discriminar igual. A los niños y niñas les vas a tener que decir que sus madres, por ser mujeres, no han de encargarse ni más ni menos que sus padres, por ser hombres, de las tareas del hogar y los cuidados. Vas a tener que dar una formación distinta a niños y niñas en tanto a que a ellas las vas a tener que preparar para protegerse de la discriminación que sufre su género, y a los niños a no adoptar el rol machista que ven en las generaciones de sus padres y abuelos.
No. Se les enseña a todos lo mismo. Que hay que tratar a los demas igual independientemente del genero que tengan.
La fertilización del óvulo le recuerda a una violación en grupo. La perspectiva de género en ciencia actuando.
Y menos mal que las secreciones de encimas por parte del espermatozoide que consige fecundar el óvulo no le recuerdan a la burundanga.
De algo hay que vivir. Unos se dedican al tarot https://tarotcarmenbilbao.com/, otros a montar casas de apuestas y esta a escribir sobre género.
ciertamente que otros se dediquen al tarot es una buena opción, ya que pueden aprender algo nuevo y manipular muy bien la energia de los astros, de verdad es una opcion que cualquier humano respetaria
No me parece un buen ejemplo, la verdad es que tiene toda la pinta de que eran tal para cual. Sé lo que quieres decir, que a él se le condenó socialmente sin saber nada, y ella era la pobre víctima inocente por ser mujer. El problema, es que el actor ya de por sí ha tenido infinitas polémicas, y los productores le tienen en la lista negra por su falta de compromiso. Al final, tampoco te puedes fiar de los jueces, porque en vista de las sentencias que dictan, está claro que aquí no se puede creer uno a nadie.
En mi trabajo, tuvimos un caso en el que una mujer poquita cosa, maltrataba físicamente a su marido, que era un auténtico gigante que podría levantar un coche. El pobre iba muerto de vergüenza, pero decía que ya no aguantaba más, y lo cierto es que la historia demostró ser cierta.
Más que presunción de inocencia, que también, lo que hay que tener es escepticismo sobre todo lo que no se conozca de primera mano.
Estamos viviendo el reverso de la campaña del #MeToo, que como muchas campañas empezó con algo muy loable, dar voz a las víctimas, hasta pasar a ser una especie de jurado popular. El problema es que un jurado popular no ofrece ninguna garantía al sospechoso, claro, y esto abre la puerta a que auténticas hijas de puta (que las hay, sí, hay mujeres jodidamente malvadas, psicópatas, mentirosas y retorcidas) utilicen el sistema para sus propios fines.
Pero no es nuevo, esto lo sabemos desde hace mucho y por eso el Derecho se fue desarrollando, para evitar esto. Y ahora parece mentira que tengamos que recordarlo, pero es preciso dar un paso atrás en estas campañas y dejar actuar a la justicia tranquilamente, porque si no la brecha social va a crecer.
Pero Antonio, eso que dices nadie normal lo pone en duda. Es que es tan obvio que intentar abrir un debate sobre esto es demencial.
Debería ser normal, pero todos conocemos a muchísima gente que toma partido a la mínima, según su ideología.
Lo más sano es admitir que, sin pruebas, no se puede afirmar nada categóricamente. Pero la sororidad radical o la misoginia, por poner dos ejemplos antagónicos, campan a sus anchas. Y así, pues estamos como estamos.
Estamos viviendo el reverso de la campaña del #MeToo, que como muchas campañas empezó con algo muy loable, dar voz a las víctimas, hasta pasar a ser una especie de jurado popular. El problema es que un jurado popular no ofrece ninguna garantía al sospechoso, claro, y esto abre la puerta a que auténticas hijas de puta (que las hay, sí, hay mujeres jodidamente malvadas, psicópatas, mentirosas y retorcidas) utilicen el sistema para sus propios fines.
Los datos de denuncias falsas en violencia de género, ya te digo yo que no se lo creen ni ellos. En las denuncias se miente muchísimo, no creo que en violencia de género se mienta más, simplemente igual que en las demás. Es decir, que no te crees nada hasta que lo pruebas, porque vaya morro que le echa mucha gente. Por decir algo así, que además lo conozco bien por mi trabajo, me han llamado poco menos que violador.
Ser ecuánime hoy en día es poco menos que ser un apestado.
Estamos viviendo el reverso de la campaña del #MeToo, que como muchas campañas empezó con algo muy loable, dar voz a las víctimas, hasta pasar a ser una especie de jurado popular. El problema es que un jurado popular no ofrece ninguna garantía al sospechoso, claro, y esto abre la puerta a que auténticas hijas de puta (que las hay, sí, hay mujeres jodidamente malvadas, psicópatas, mentirosas y retorcidas) utilicen el sistema para sus propios fines.
Los datos de denuncias falsas en violencia de género, ya te digo yo que no se lo creen ni ellos. En las denuncias se miente muchísimo, no creo que en violencia de género se mienta más, simplemente igual que en las demás. Es decir, que no te crees nada hasta que lo pruebas, porque vaya morro que le echa mucha gente. Por decir algo así, que además lo conozco bien por mi trabajo, me han llamado poco menos que violador.
Ser ecuánime hoy en día es poco menos que ser un apestado.
Quizá estoy sesgado porque conozco muchos casos, pero me temo que las denuncias falsas en este asunto superan el porcentaje habitual. Obviamente no tenemos datos y no los vamos a tener, son difíciles de construir y tampoco interesa mucho.
Pues no se sabe, es ver la versión que da cada uno, tan distinta e incompatible, y es para flipar. Si ya entramos en juicios con abogados de por medio, ni la mejor de las películas.
Quizás al haber rupturas o divorcios, la cosa sea aún peor, lo cierto es que se miente más que se habla. Las denuncias entre vecinos quizás sean las menos creíbles y más surrealistas, al menos yo me quedo ojiplático.
Pues no se sabe, es ver la versión que da cada uno, tan distinta e incompatible, y es para flipar. Si ya entramos en juicios con abogados de por medio, ni la mejor de las películas.
Quizás al haber rupturas o divorcios, la cosa sea aún peor, lo cierto es que se miente más que se habla. Las denuncias entre vecinos quizás sean las menos creíbles y más surrealistas, al menos yo me quedo ojiplático.
Claro, en un contexto de divorcio, sobre todo con hijos de por medio, es desgraciadamente un arma muy a mano, entre otras cosas porque el concepto de maltrato es tan amplio (no es una crítica, efectivamente lo es) que muchas cosas pueden deslizarse malintencionadamente en él.
Yo conozco un caso de una mujer de profesión forense que tras un divorcio ha denunciado falsamente al ex-marido.
Suerte que la fiscal y la juez, junto con la perito psicóloga fueron ecuánimes y profesionales ya que el hombre se libró, pero muy cerca estuvo de ser condenado. La furcia de la forense se las sabía todas, ¡no te jode, era su trabajo!
Pero es un caso, de los otros que conozco, que son cuatro, es la mujer que ha sido ciertamente maltratada.
Que existe violencia de género no se puede poner en duda de ninguna de las maneras, las estadísticas y los datos están ahí.
Repito: la LIVG está para quedarse, el intentar poner en duda su fundamento es como buscar unicornios.
Estamos viviendo el reverso de la campaña del #MeToo, que como muchas campañas empezó con algo muy loable, dar voz a las víctimas, hasta pasar a ser una especie de jurado popular. El problema es que un jurado popular no ofrece ninguna garantía al sospechoso, claro, y esto abre la puerta a que auténticas hijas de puta (que las hay, sí, hay mujeres jodidamente malvadas, psicópatas, mentirosas y retorcidas) utilicen el sistema para sus propios fines.
Los datos de denuncias falsas en violencia de género, ya te digo yo que no se lo creen ni ellos. En las denuncias se miente muchísimo, no creo que en violencia de género se mienta más, simplemente igual que en las demás. Es decir, que no te crees nada hasta que lo pruebas, porque vaya morro que le echa mucha gente. Por decir algo así, que además lo conozco bien por mi trabajo, me han llamado poco menos que violador.
Ser ecuánime hoy en día es poco menos que ser un apestado.
Quizá estoy sesgado porque conozco muchos casos, pero me temo que las denuncias falsas en este asunto superan el porcentaje habitual. Obviamente no tenemos datos y no los vamos a tener, son difíciles de construir y tampoco interesa mucho.
Vaya, estaba muy de acuerdo contigo en lo que estabas diciendo, con el matiz de que el #metoo fue necesario, en tanto que hay que animar a denunciar, pero también hay que mostrar la otra cara de la moneda para que seamos conscientes de la importancia de la presunción de inocencia, pilar maestro del derecho.
Ahora bien, dices esto con toda la razón para después presuponer que en violencia de género hay más denuncias falsas que en otros delitos sin datos, porque simplemente lo crees. Un poco contradictorio.
Yo creo que las denuncias falsas cuya finalidad es conseguir dinero, por ejemplo, deben de ser más. Pero vaya, también es pura fe / intuición.
No me parece un buen ejemplo, la verdad es que tiene toda la pinta de que eran tal para cual. Sé lo que quieres decir, que a él se le condenó socialmente sin saber nada, y ella era la pobre víctima inocente por ser mujer. El problema, es que el actor ya de por sí ha tenido infinitas polémicas, y los productores le tienen en la lista negra por su falta de compromiso. Al final, tampoco te puedes fiar de los jueces, porque en vista de las sentencias que dictan, está claro que aquí no se puede creer uno a nadie.
En mi trabajo, tuvimos un caso en el que una mujer poquita cosa, maltrataba físicamente a su marido, que era un auténtico gigante que podría levantar un coche. El pobre iba muerto de vergüenza, pero decía que ya no aguantaba más, y lo cierto es que la historia demostró ser cierta.
Más que presunción de inocencia, que también, lo que hay que tener es escepticismo sobre todo lo que no se conozca de primera mano.
Yo opino al revés: que más que escepticismo sobre lo que no se conozca de primera mano, que también, hay que respetar siempre la presunción de inocencia. Y como dice Shape, parece mentira que haya que recordar esto ahora y asusta que haya quienes defiendan públicamente que paguen inocentes.
Yo no sé si Johnny Depp es un bandarra o si es insoportable rodar con él, no le conozco en persona, no he rodado con él. En cualquier caso, supongo que esa forma de ser la habrá tenido de toda la vida, pero lo cierto es que empezó a perder contratos desde las acusaciones de su ex, no antes, y por tanto todo parece indicar que ha sido eso, y no ha otra cosa, lo que más ha pesado en que se convirtiera en un apestado. Como te dije en Fb, con poquillo que haya tenido que ver el Me Too en todo esto, ya es para que unos cuantos y unas cuantas se lo hagan mirar. Por lo demás, estoy completamente de acuerdo con Shapeley y espero que, como él dice, se dé algún paso atrás en esto de los linchamientos públicos porque de no ser así me temo que nos encaminamos a un mundo un poquito arbitrario.
Realmente, todos estamos bastante de acuerdo en lo importante, no sé a qué vienen estos tochos discutiendo XD
Hemos pasado del algo ha hecho para merecerlo, al Yo te creo hermana. Afirmaciones que solo se deberían hacer, si se tuviera información rigurosa, no para reforzar prejuicios.
Es especialmente grave en Estados Unidos, donde son muy histéricos con estas cosas. Viendo que hemos importado de allí tanto malo, la corrección política llevada al extremo y los linchamientos, supongo que vamos por el mismo camino.
A mí me preocupa sobre todo, la facilidad con que la gente consume y se cree noticias falsas. Siendo la mayoría, mirando un poquito, fáciles de desmontar y hasta absurdas de por sí.
En cuanto a la presunción de inocencia, no es más que otra forma de sano escepticismo. Por supuesto, que la defiendo a muerte. Es uno de los pilares de un sistema democrático, un derecho básico.
También deberíamos de pisar suelo. Quiero decir, que toda profesión tiene su riesgo. El riesgo de vivir de la popularidad tiene un riesgo distinto a reparar tejados, pero tiene un riesgo. Y es que alguien, y no sólo una pareja o expareja, puede intentar arruinar tu imagen. Y en ese mundo la imagen lo es todo, y es muy frágil.
No quiero decir que sea justo, quiero decir que es lo que hay.
¿Debe un político dimitir si le imputan un delito del que es inocente? Yo creo que sí, porque quien se dedica a servicio público debe asumir que lo primero es preservar las instituciones. Si quieres asegurarte de no morir en un accidente de tráfico, no conduzcas ni que te conduzcan.
Lo que no podemos es decir a mujeres maltratadas atemorizadas, que ya son asesinadas tras meses de palizas sin registrar denuncias, que se les va a poner en duda si deciden acudir a la policía.
Como siempre, hay que buscar esa mesura que mejora la vida de las personas, sin caer en extremos donde no se puede vivir. Y desde luego en el mundo de Hollywood no se podía vivir.
Comentarios
Si no discriminas a la gente pos su sexo y su orientacion sexual eres nazi.
Las discriminaciones positivas (sí, positivas), han de ser temporales mientras se corrige la injusticia.
Si quieres abordarlo solo desde la educación (dejando en la estacada a las generaciones presentes de mujeres y preocupándote sólo de las futuras), vas a tener que discriminar igual. A los niños y niñas les vas a tener que decir que sus madres, por ser mujeres, no han de encargarse ni más ni menos que sus padres, por ser hombres, de las tareas del hogar y los cuidados. Vas a tener que dar una formación distinta a niños y niñas en tanto a que a ellas las vas a tener que preparar para protegerse de la discriminación que sufre su género, y a los niños a no adoptar el rol machista que ven en las generaciones de sus padres y abuelos.
Los argumentos de Diego se podrían resumir con aquella frase de la estalinista Dolores Ibárruri que decía que es preferible condenar a cien inocentes antes que poner en libertad a un culpable.
http://www.esverdadque.info/pasionaria-mas-vale-ejecutar-100-inocentes/
Pero en esencia se traduce en que se va a atacar al consenso ahora que no gobierna la derecha, porque evidentemente la LIVG es discriminación positiva aceptada por todas las partes (menos Vox que no pintaba nada en al 2004).
Búscate a otro para hacer terapia, so memo.
Te iba a decir que ese enlace corrobora la cita, pero... ¿acaso alguna vez enlazas algo que te dé la razón?
Y encima le copias las gilipolleces al otro subnormal. Solo te falta lo de "criptofacha" para que no se te pueda distinguir de Sucu. Sigue así, majo
Vuelve a leerlo...
Viendo tu comprensión lectora, me extrañan menos las criptofachadas que te gastas.
No. Se les enseña a todos lo mismo. Que hay que tratar a los demas igual independientemente del genero que tengan.
Sí al menos pecases de inocencia o ingenuidad... Pero no es eso, no es eso...
Lo que veníamos diciendo:
Btw me acabo de fijar y está muy desmejorado, jodido. Lo que hace la mala vida... y la novia ídem.
ciertamente que otros se dediquen al tarot es una buena opción, ya que pueden aprender algo nuevo y manipular muy bien la energia de los astros, de verdad es una opcion que cualquier humano respetaria
No me parece un buen ejemplo, la verdad es que tiene toda la pinta de que eran tal para cual. Sé lo que quieres decir, que a él se le condenó socialmente sin saber nada, y ella era la pobre víctima inocente por ser mujer. El problema, es que el actor ya de por sí ha tenido infinitas polémicas, y los productores le tienen en la lista negra por su falta de compromiso. Al final, tampoco te puedes fiar de los jueces, porque en vista de las sentencias que dictan, está claro que aquí no se puede creer uno a nadie.
En mi trabajo, tuvimos un caso en el que una mujer poquita cosa, maltrataba físicamente a su marido, que era un auténtico gigante que podría levantar un coche. El pobre iba muerto de vergüenza, pero decía que ya no aguantaba más, y lo cierto es que la historia demostró ser cierta.
Más que presunción de inocencia, que también, lo que hay que tener es escepticismo sobre todo lo que no se conozca de primera mano.
Pero no es nuevo, esto lo sabemos desde hace mucho y por eso el Derecho se fue desarrollando, para evitar esto. Y ahora parece mentira que tengamos que recordarlo, pero es preciso dar un paso atrás en estas campañas y dejar actuar a la justicia tranquilamente, porque si no la brecha social va a crecer.
Debería ser normal, pero todos conocemos a muchísima gente que toma partido a la mínima, según su ideología.
Lo más sano es admitir que, sin pruebas, no se puede afirmar nada categóricamente. Pero la sororidad radical o la misoginia, por poner dos ejemplos antagónicos, campan a sus anchas. Y así, pues estamos como estamos.
Los datos de denuncias falsas en violencia de género, ya te digo yo que no se lo creen ni ellos. En las denuncias se miente muchísimo, no creo que en violencia de género se mienta más, simplemente igual que en las demás. Es decir, que no te crees nada hasta que lo pruebas, porque vaya morro que le echa mucha gente. Por decir algo así, que además lo conozco bien por mi trabajo, me han llamado poco menos que violador.
Ser ecuánime hoy en día es poco menos que ser un apestado.
Quizá estoy sesgado porque conozco muchos casos, pero me temo que las denuncias falsas en este asunto superan el porcentaje habitual. Obviamente no tenemos datos y no los vamos a tener, son difíciles de construir y tampoco interesa mucho.
Quizás al haber rupturas o divorcios, la cosa sea aún peor, lo cierto es que se miente más que se habla. Las denuncias entre vecinos quizás sean las menos creíbles y más surrealistas, al menos yo me quedo ojiplático.
Claro, en un contexto de divorcio, sobre todo con hijos de por medio, es desgraciadamente un arma muy a mano, entre otras cosas porque el concepto de maltrato es tan amplio (no es una crítica, efectivamente lo es) que muchas cosas pueden deslizarse malintencionadamente en él.
Suerte que la fiscal y la juez, junto con la perito psicóloga fueron ecuánimes y profesionales ya que el hombre se libró, pero muy cerca estuvo de ser condenado. La furcia de la forense se las sabía todas, ¡no te jode, era su trabajo!
Pero es un caso, de los otros que conozco, que son cuatro, es la mujer que ha sido ciertamente maltratada.
Que existe violencia de género no se puede poner en duda de ninguna de las maneras, las estadísticas y los datos están ahí.
Repito: la LIVG está para quedarse, el intentar poner en duda su fundamento es como buscar unicornios.
Vaya, estaba muy de acuerdo contigo en lo que estabas diciendo, con el matiz de que el #metoo fue necesario, en tanto que hay que animar a denunciar, pero también hay que mostrar la otra cara de la moneda para que seamos conscientes de la importancia de la presunción de inocencia, pilar maestro del derecho.
Ahora bien, dices esto con toda la razón para después presuponer que en violencia de género hay más denuncias falsas que en otros delitos sin datos, porque simplemente lo crees. Un poco contradictorio.
Yo creo que las denuncias falsas cuya finalidad es conseguir dinero, por ejemplo, deben de ser más. Pero vaya, también es pura fe / intuición.
Yo opino al revés: que más que escepticismo sobre lo que no se conozca de primera mano, que también, hay que respetar siempre la presunción de inocencia. Y como dice Shape, parece mentira que haya que recordar esto ahora y asusta que haya quienes defiendan públicamente que paguen inocentes.
Yo no sé si Johnny Depp es un bandarra o si es insoportable rodar con él, no le conozco en persona, no he rodado con él. En cualquier caso, supongo que esa forma de ser la habrá tenido de toda la vida, pero lo cierto es que empezó a perder contratos desde las acusaciones de su ex, no antes, y por tanto todo parece indicar que ha sido eso, y no ha otra cosa, lo que más ha pesado en que se convirtiera en un apestado. Como te dije en Fb, con poquillo que haya tenido que ver el Me Too en todo esto, ya es para que unos cuantos y unas cuantas se lo hagan mirar. Por lo demás, estoy completamente de acuerdo con Shapeley y espero que, como él dice, se dé algún paso atrás en esto de los linchamientos públicos porque de no ser así me temo que nos encaminamos a un mundo un poquito arbitrario.
Hemos pasado del algo ha hecho para merecerlo, al Yo te creo hermana. Afirmaciones que solo se deberían hacer, si se tuviera información rigurosa, no para reforzar prejuicios.
Es especialmente grave en Estados Unidos, donde son muy histéricos con estas cosas. Viendo que hemos importado de allí tanto malo, la corrección política llevada al extremo y los linchamientos, supongo que vamos por el mismo camino.
A mí me preocupa sobre todo, la facilidad con que la gente consume y se cree noticias falsas. Siendo la mayoría, mirando un poquito, fáciles de desmontar y hasta absurdas de por sí.
En cuanto a la presunción de inocencia, no es más que otra forma de sano escepticismo. Por supuesto, que la defiendo a muerte. Es uno de los pilares de un sistema democrático, un derecho básico.
No quiero decir que sea justo, quiero decir que es lo que hay.
¿Debe un político dimitir si le imputan un delito del que es inocente? Yo creo que sí, porque quien se dedica a servicio público debe asumir que lo primero es preservar las instituciones. Si quieres asegurarte de no morir en un accidente de tráfico, no conduzcas ni que te conduzcan.
Lo que no podemos es decir a mujeres maltratadas atemorizadas, que ya son asesinadas tras meses de palizas sin registrar denuncias, que se les va a poner en duda si deciden acudir a la policía.
Como siempre, hay que buscar esa mesura que mejora la vida de las personas, sin caer en extremos donde no se puede vivir. Y desde luego en el mundo de Hollywood no se podía vivir.
Esto es el velo islámico: