Antes de nada planteo una primera pregunta.
¿Por qué la democracia?
- Porque es el menos malo de los sistemas de convivencia que ha conocido la humanidad.
- Porque qué mejor acuerdo de convivencia que el definido por una mayoría social.
- Porque sin diálogo y consenso, estamos condenados a la violencia.
- Porque los derechos y libertades civiles están por encima de cualquier consideración política, ideológica o religiosa.
- Porque aquella justicia que se imparte en base a leyes y normas que parten del consenso social y político siempre será mayor en sí misma.
- Porque, al fin y al cabo, todos queremos un mínimo nivel de vida, y la democracia nos ofrece un marco de oportunidades que otros regímenes no pueden garantizar.
Ahora viene la segunda.
¿Y qué sucede si los sistemas democráticos dejan en un momento dado de ofrecernos tales garantías? ¿Qué deberíamos hacer hoy para no caer en el ayer en base a lo que nuestra historia nos ha enseñado? ¿Por qué los sistemas democráticos lo son tanto que permiten hasta su propia demolición por consenso mayoritario?
Por eso, mirando hacia atrás, a nuestra historia, llevo algún tiempo pensando si no irá siendo hora de plantearse cambios drásticos. Y con cambios drásticos me refiero a empezar a establecer todos los mecanismos necesarios de protección que actúen de coraza frente a las mayorías para preservar la democracia y los derechos y libertades civiles. De nada sirve un sistema democrático si el marcó de actuación del mismo, al final,
sirve para que una mayoría constituída por las clases populares consiga que los movimientos populistas accedan al poder como ya ha sucedido en Italia, USA o UK, y está apunto de suceder en otros países, también fuertes, nada menos que en Francia o Alemania.
Como hemos podido comprobar, las mayorías populares no están capacitadas para decidir el futuro del mundo en tiempos de vacas flacas. Algunos dirán que la solución es la democracia directa, cuando tal sistema nos llevaría de cabeza, antes o después, a la peor de las dictaduras.
Cada día tengo más claro que, o se ataja ya el problema, o volveremos a un mundo de naciones, fronteras, aranceles, xenofobia, ruptura, violencia, esclavismo, injusticia, pobreza y un largo etcétera.
Las democracias, en mi opinión, deberían de establecer inmediatamente esos mecanismos de protección ante las hordas populares enfurecidas por la crisis económica o por la falta de perspectiva de futuro, porque las mayorías populares no son capaces de hallar la solución en tiempos de enfado, indignación, hartura, ira e incluso odio: muy al contrario, buscan de las peores alternativas entre las posibles.
Comentarios
Metáfora desde mi punto de vista sobre este gobierno en esta democracia:
https://es.m.wikipedia.org/wiki/Mejoría_de_la_muerte
Totalmente de acuerdo. La cuestión es cómo someter a las mayorías en democracia a las leyes que garantizan las libertades y derechos civiles básicos. No es un tema sencillo, pero sólo se me ocurre definir y constituir a nivel europeo un catálogo de normas legislativas difícilmente modificables. Por ejemplo, si se establece como ilegal no socorrer a personas cuya vida está en riesgo, o si se establece como ilegal no poder elaborar un registro de individuos de una etnia u orientación sexual determinada, como se trata de normas que afectan a derechos civiles básicos, deberían de someterse a una suerte de blindaje institucional que sólo pudiesen verse modificadas con el aval de 3/4, por decir algo, de los representantes del poder legislativo.
http://www.guerraeterna.com/el-gobierno-de-trump-encierra-a-los-hijos-de-inmigrantes-sin-papeles-en-jaulas-para-presionar-a-sus-padres/
Jaulas para perros.
No doy crédito. Entre esto y el registro de gitanos que quiere elaborar el gobierno italiano no doy crédito. Estados Unidos y Europa, 2018.
https://m.eldiario.es/miradaalmundo/situacion-mundial-empieza-parecerse-anos_6_786081414.html
- Salir de Schengen tras lo de Puigdemont.
- Volver a la ley del aborto de 1985.
- Ilegalizar a los partidos independentistas.
Sigamos...
Es horrible. Un gobierno xenófobo agita a las masas y acaban pasando estas desgracias. Y lo peor son las dudas que hay sobre si un Estado hasta hace poco democrático como el italiano seguirá siendo capaz de resolver judicialmente de una forma independiente y ajustada a derecho este tipo de hechos. De momento, nadie del gobierno se ha pronunciado, y no sé si es mejor que sigan sin hacerlo.
Lo de Italia está siendo tremendo e inimaginable.
Menos mal que estás tú aquí para salvar el mundo ohh gran líder, yo voto por nombrarte emperador supremo, ah no, que en época de vacas flacas las clases populares no podemos decidir, tendrás que nombrarte tu mismo
Ahora bien, en la práctica se demuestra que no es más que un sistema de mafias clientelares y corruptas para poder trincar lo más posible y dejar el poder en manos de los de siempre.
La democracia popular, la constituye una casta política sin controles ni limites, que de manera indefinida ostenta el poder, y que se libra de los controles democráticos bajo la excusa que pertenecen a un sistema opresor capitalista, para instaurar un sistema que en lo político es más cercano a la monarquía absolutista, pero sin derechos hereditarios, salvo en el caso de Korea del Norte.
Hablando de la mala y el facha...
Malos tiempos se avecinan. En España el PP quiere hacer lo que la derecha británica y estadounidense. "Para que otros se coman la tarta, me convierto yo en ultra".
Una política de derechas que, para lo que es la derecha española, ofrecía algo de sensatez. Viendo lo que viene, se le echará de menos.
Firmado: un don nadie de izquierdas.
https://www.eleconomista.es/economia/noticias/9400270/09/18/Espana-tiene-la-sanidad-mas-eficiente-de-Europa-y-la-tercera-del-mundo-.html
Esto me ha recordado a la puesta en escena que hicieron Felipe González y José María Aznar en El País en un debate-mítin moderado por Soledad Gallego, en el que defendían la Constitución y el régimen del 78 (sí, así lo llamaron ambos), porque otra cosa sería el mal. Aunque eso sí, ninguno se cerraba a reformarlo para mejorarlo.
El problema es que los mayores defensores de ese régimen que blindó durante décadas un Estado de bienestar muy notable, aunque no consiguió desarrollar todos los derechos constitucionales (algunos fundamentales, como es la vivienda), hoy son minoría en la Cámara. Los revolucionarios de hoy reclaman la conservación del régimen de bienestar. Es el PSOE el partido que empezó a desmantelarlo todo, y por supuesto el PP continuó, y Cs no pide otra cosa que la aceleración de esa pérdida de derechos.
Los rojos peligrosos de hoy son conservadores. Es el PP de Aznar y Casado, Albert Rivera y el Pedro Sánchez quienes quieren acabar con el orden de derechos y libertades: sanidad, educación, libertad de expresión, sindicalismo... van a por todo eso.
El fascismo también aprovechó el declive de la democracia alemana.
https://www.lavanguardia.com/internacional/20180921/451942926059/ultraderecha-alemana-supera-spd.html
https://www.infolibre.es/noticias/politica/2018/07/01/el_presidente_contencioso_supremo_fue_profesor_hasta_hace_ano_del_centro_universitario_propiedad_los_bancos_espanoles_87989_1012.html
Pero bueh... El sol sigue saliendo cada mañana.
Eso sí, me alegro de que el poder judicial de este país se haya quitado la careta. Porque si esto no convence a los demócratas de que hay que superar la Transición del franquismo al régimen del 78, ya no hay nada que hacer en y por este país.
https://www.publico.es/espana/alta-instancia-judicial-sociologicamente-franquista.html
PD: El artículo de Público es especialmente estúpido: en las oposiciones para juez te tienes que aprender las Leyes de Enjuiciamiento Civil y Criminal, el Código Penal, el Código Civil y algunas otras leyes pero lógicamente nada tienes que aprender de Historia, ni la represión franquista, ni la invasión napoleónica ni el Imperio de Carlos I. Y, recíprocamente, en unas oposiciones para profesor de Historia, no te hacen memorizar el Código Penal.
Hacer propaganda de que el sistema judicial es franquista, ayuda a generar la idea en la opinión pùblica que es necesaria su intervención politica, y eliminar la titularidad de los jueces y nombrar a dedo los provisorios, claro, comprometidos con "el cambio". Simplemente es el justificativo para eliminar la independencia del poder judicial y convertirlo en una justicia "popular" o con otro apellido, sometida a la casta politica de "el cambio".
https://www.eldiario.es/zonacritica/franquismo-sigue-poder_6_764383606.html
https://blogs.publico.es/juan-carlos-monedero/2018/10/22/un-golpe-contra-la-democracia-del-supremo/
A ver quién es este HdP...
https://es.wikipedia.org/wiki/Luis_María_Díez-Picazo_Giménez
¡Hostia, hijo del otro Diez-Picazo!
Eso si, pero más bien es culpa del poder político, que no legisla para acabar con eso (porque no le interesa, claro) y, en parte, del poder judicial, que no alza la voz porque son unos cagones.
¿¡Cómo van a actuar contra si mismos!?
"Como las demás tiranías, esta de la mayoría fue al principio temida, y lo es todavía, cuando obra, sobre todo, por medio de actos de las autoridades. Pero las personas reflexivas se dieron cuenta de que cuando es la sociedad misma el tirano, sus medios de tiranizar no están limitados a los actos que puede realizar mediante sus funcionarios políticos. La sociedad puede ejecutar, y ejecuta, sus propios decretos; y si dicta malos decretos en vez de buenos, o si los dicta a propósito de cosas en las que no debería mezclarse, ejerce una tiranía social más formidable que muchas de las opresiones políticas, ya que si bien no suele tener a su servicio penas tan graves, deja menos medios para escapar de ella, pues penetra mucho más en los detalles de la vida y llega a encadenar el alma. Por eso no basta la protección contra la tiranía del magistrado. Se necesita también la protección contra la tiranía de la opinión y sentimiento prevalecientes; contra la tendencia de la sociedad a imponer, por medios distintos de las penas civiles, sus propias ideas y prácticas como reglas de conducta a aquellos que disientan de ellas; a ahogar el desenvolvimiento, a impedir la formación de individualidades originales y a obligar a todos los caracteres a moldearse sobre el suyo propio”.
El ultraderechista Bolsonaro gana las elecciones en Brasil - https://m.eldiario.es/31753f23_829767459/
Sí, los brasileños se han equivocado, y no, no respeto el resultado. La democracia en Brasil queda muy tocada. Las democracias del mundo no pueden permitir que más Bolsonaros puedan presentarse a dirigir gobiernos.