Por causas un poco extrañas en mi casa se está quedando durante unos meses que pueden ser más el gato de mi exnovia que se ha tenido que ir a vivir a Roma por una beca. Es un gato de dos anos y creo que bastante sociable, pero sé bastante poco de gatos.
Por otro lado mi novia ha vuelto por una temporada de Suecia y querría traer a su perro a casa (que ahora está en casa de sus padres), un perro de 7 anos poco sociable con otro bichos y que está acostumbrado a perseguir gatos cuando vamos al campo.
Mi primera opción sería no traer el perrillo hasta que el gato se vaya, más que nada por no hacerles padecer un estrés innecesario. Pero creo que esa opción no es posible, más que nada porque entiendo que para mi novia es importante ver que el gato de mi ex no está por encima de su perro.
En fin, dado que en este chat hay expertos en crianza animal, algunos en gatos y otros en perros, me gustaría saber qué consejos me dais, cómo hacer las presentaciones y acostumbrarlos uno al otro. En realidad temo por el perro, el gato es bastante más ágil, fuerte y listo y si se ve acorralado o tensión puede llegar a hacerle daño.
Lo sé, la opción fácil es echar al gato, pero me comprometí y sería una putada para alguien que vive en Italia y tiene poco margen de maniobra y también para el gato que ya se ha acostumbrado a vivir en mi casa y, la verdad, le he cogido cariño.
Comentarios
Hay que tener mucha paciencia para socializarlos. Tranquilo. Y preguntar a tu veto si los conoce.
El gato normalmente desconfía más y durante más tiempo. Y si es el el perro el recién llegado ni te cuento
Al principio la casa como un submarino. En vez de puertas escotillas. Ya se olerán, se acostumbrarán y se dormirán juntos si se les da el suficiente tiempo. Temple y no fuerces la situación, es lo mejor que se me ocurre. Y no solo de boquilla, de verdad, no pocas mascotas te huelen el estado de ánimo
Cuiando los juntes es mejor hablarles en tono neutro y normal, sin estar nervioso: "mira nene aquí viene el bigotes a ver qué pasa, es un gato, etc."
Échale mucha paciencia, y más si, como dices, tu perro ya ha tenido una mala experiencia con gatos
A ojo, porque de perros de compañía controlo poco, estoy por decirte que los yorkies hace 30 años eran mucho más terriers que ahora
Yo antes no daba un duro por ellos para un piso urbano y, aunque no son de mi tipo, me han cerrado la boca bien cerrada
Si el perro no es de los que mata, dejalo quieto con el gato, ya se acostumbran uno del otro. Al principio daran algo de guerra, pero al mes cada quien agarra su rumbo.
PS: Ahora en serio, no hagas caso, despacito y con paciencia para evitar estrés en los animales, y vigilando siempre que no se salten al cuello.
Ahora, si me preguntas si he hecho algo especial, pues no, les he metido en casa y punto ... si acaso al principio estaba un poco al loro por si se liaba parda, pero claro, tengo la ventaja de un perro muy muy bueno y que ya en tiempos adoptó una gatita como hermana pequeña (a esa si que la quería tela, que cuando se la llevo mi sobrina, aka "la loca de los gatos", estaba un poco depre y no hacía más que buscarla)