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La caída del régimen
En la década de los 60 se empezó a planificar el futuro de España sin Franco. El mismo Franco decidió su sucesor, Juan Carlos, y por extensión, Felipe. La correlación de fuerzas (o de debilidades, como dirían algunos) hizo posible el tránsito a un régimen de libertades, de democracia híbrida, dirigido por una élite renovada, pero elegida y tutelada por la antigua. Necesitaban un plan, y ese plan se denominaría Partido Socialista Obrero Español. Un líder carismático, una ingente cantidad de dinero en difusión y propaganda, y el PSOE sería el partido hegemónico de la izquierda en España. Así, AP, luego PP, sería el sucesor ideológico del franquismo y el PSOE, un muro de contención para las aspiraciones de la izquierda.
El éxito fue apabullante.
Cuarenta años después, ese muro de contención en forma de partido se resquebraja, incapaz de sostener la incoherencia entre su discurso y sus acciones en los sucesivos gobiernos. El descrédito es de ya seis millones de ciudadanos de izquierdas que ya no confían en la marca PSOE, en fin, en el partido del régimen.
Hoy sale a noticia que sectores del PP creen, por el nombramiento de Pedro Sánchez con tan sólo 90 diputados y sin apoyos claros, que el rey es socialista.
Se equivocan.
El rey es del régimen, y el régimen no se sostiene sin en PSOE.
Con el PSOE casi hundido, intentando dar sus últimos coletazos antes de que la siguiente legislatura comandada por Bruselas se lo lleve por delante, con el rey tocado por el descrédito de la corrupción, con el desmoronamiento del sistema caciquil y de corruptelas, con el triunfo de las reivindicaciones separatistas que ponen en cuestión el mismísimo primer artículo de la Constitución, con el crecimiento exponencial de diputados republicanos, y ahora con el excesivo e inevitable protagonismo político del rey, teniendo que elegir entre Mariano y Pedro (lo que le resta la más que necesaria neutralidad para la Corona), podemos hablar con toda firmeza y seguridad del principio del fin del régimen de transición de 1978.
El éxito fue apabullante.
Cuarenta años después, ese muro de contención en forma de partido se resquebraja, incapaz de sostener la incoherencia entre su discurso y sus acciones en los sucesivos gobiernos. El descrédito es de ya seis millones de ciudadanos de izquierdas que ya no confían en la marca PSOE, en fin, en el partido del régimen.
Hoy sale a noticia que sectores del PP creen, por el nombramiento de Pedro Sánchez con tan sólo 90 diputados y sin apoyos claros, que el rey es socialista.
Se equivocan.
El rey es del régimen, y el régimen no se sostiene sin en PSOE.
Con el PSOE casi hundido, intentando dar sus últimos coletazos antes de que la siguiente legislatura comandada por Bruselas se lo lleve por delante, con el rey tocado por el descrédito de la corrupción, con el desmoronamiento del sistema caciquil y de corruptelas, con el triunfo de las reivindicaciones separatistas que ponen en cuestión el mismísimo primer artículo de la Constitución, con el crecimiento exponencial de diputados republicanos, y ahora con el excesivo e inevitable protagonismo político del rey, teniendo que elegir entre Mariano y Pedro (lo que le resta la más que necesaria neutralidad para la Corona), podemos hablar con toda firmeza y seguridad del principio del fin del régimen de transición de 1978.
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Comentarios
Con todos los respetos pero BULLSHIT
El franquismo eligió a un mortal en la sucesión, tanto como el mismo dictador, y en tanto hubo decantación por la restauración de la monarquía hereditaria. Al fin, es una forma de control en la sucesión que va más allá del alcance vital de una generación. ¿O acaso crees que hubo otro motivo?
Antes me trago lo de Rockwell, de verdad.
¿En serio?
De ahí que liquidasen al PSOE histórico (con dinero y marketing) y reciclasen las siglas construyendo un nuevo PSOE cómplice de las élites de entonces, y a la vez atractivo para la izquierda del país.
La subida al poder del PSOE se puede explicar de muchas maneras y no soy yo el más indicado precisamente pero por ahí no van ninguno de los tiros. Si a mi me preguntan lo más significativo es la oposición a la última UCD. Normalmente certera pero siempre feroz e incansable.
Si me dices que Podemos sale de la nada, o de la brillante idea de tres profesores universitarios, te diré lo mismo. Han dejado descolocada a la vieja guardia del régimen, pero han sido puestos ahí por otros, también con unos intereses y una financiación potente.
Grande Trevijano.
Yo sé quienes son claramente los anormales en este país, nos lo ha demostrado incluso AI y la mayoría de portadas internacionales con motivo de los titiriteros o incluso como se quedan a cuadros del circo con los reyes magos con los graves problemas que tiene este país. Así que de caída nada de nada.
Aquí nunca ha habido transición nos han tomado el pelo. Simplemente se asimiló el Franquismo, la Iglesia, el Ejercito y el poder económico con una nueva cara más amable.
España nunca ha dejado de ser el cortijo de determinadas familias. Si el franquismo hubiese explotado estos poderes lo hubiesen pasado mal.
El problema es pensar que Podemos va a ocupar el sitio del PSOE.
Esto dudo que ocurra al menos a corto-medio plazo. En España se puede pastorear a la población muy fácilmente y Podemos va a tener muy complicado quitarse el ODIO visceral que han metido en vena a buena parte de la población por muchos errores que puedan haber cometido.
El PSOE se está quedando con el votante más mayor y más conservador. El votante de Podemos en el resto de zonas veremos hasta donde llega, esta supeditado también a su modelo de país a nivel territorial.
Veremos al final por donde sale el nuevo gobierno pero va a ser interesante.
PSOE-Podemos no llega, va a ser el infierno en estado puro y también puede dejar a el PSOE. El PSOE va a tener complicado ser primera fuerza.
El que me intriga es el PP-PSOE-Cs que tanto ansían algunos. Como nos van a meter el falso cambio de gobierno. Siempre tendría que abstenerse PP-PSOE y siempre siendo apoyado por Cs.
Igual había intereses en la subida de Podemos para dividir a el PSOE pero se les pudo ir de las manos. En un modelo a tres había un problema, con la inclusión de Cs se puede capear el temporal.