Pareces nuevo por aquí. Si quieres participar, ¡pulsa uno de estos botones!
Balada triste del Johnny
El histórico Colegio Mayor San Juan Evangelista cierra este martes sus puertas con incertidumbre sobre su futuro
LUCÍA TABOADA 29-07-2014 - 08:07 CET
Lo primero que aprende un estudiante del Colegio Mayor San Juan Evangelista es que prácticamente nadie le conoce como el 'San Juan', sino como el 'Johnny', que no 'Jonnhy', ni 'Johny'. Conseguir escribirlo dos veces de la misma forma es la primera prueba de fuego como colegial. Lo segundo que uno aprende es que entre sus paredes de uralita tuvo lugar el último concierto de Camarón, un 25 de enero de 1992 . Y lo tercero, que siempre debes responder cuando te saludan por sus pasillos. Eso es innegociable.
'El Johnny' siempre ha tenido sus propias normas e idiosincrasia. Seguramente tenga que ver su semicircular diseño, obra de Lucho Mikel y Antonio Villoria, realizado por y para favorecer la interacción entre sus colegiales. También tienen que ver todos esos años en los que el colegio mayor presenció carreras ante los grises y fue bastión de libertad e independencia. Y mucho tiene que ver su época de esplendor cultural de la mano de su Corral de Comedias y su reconocido Club de Música en el que sonaron grandes figuras como Tete Montoliu, Dexter Gordon, Bebo Valdés, Mercedes Sosa, Chet Baker, Anthony Braxton o Paco de Lucía. Todo esto parece ahora un pasado muy lejano. Los últimos años del 'Johnny' han estado marcados por el descenso de los colegiales, la crisis, reformas y dudas sobre su futuro.
La gran mole gris situada en la salida de la madrileña estación de Metropolitano luce hoy vacía. Ya no está Isabelita en su centralita, una mujer enjuta que llevaba desde el año 1966 levantando el teléfono y dejando mensajes en los casilleros de los colegiales. No hay notas en sus tablones convocando "pachangas", ni en su cafetería se abren barriles, ni se sirven bocadillos de lomo, ni se acumulan periódicos en sus zonas comunes conocidas como "comunidades". Ya solo quedan marcas en las paredes y las firmas de artistas estampadas en los muros del auditorio Jesús Cobeta . Este martes, 29 de julio, es la fecha que Unicaja, que gestiona el centro mediante una concesión de la Complutense, ha elegido para abandonar el barco. Y durante estos últimos días colegiales y miembros del colegio mayor se han visto obligados a un acelerado traslado de sus pertenencias y las del club de música.
"Nuestra postura es que esto debería solucionarlo Unicaja", asegura José Joaquín Caerols, presidente de la Fundación San Juan Evangelista. Y es que la concesión a Unicaja es de 25 años, hasta el 2038. La situación que se abre ahora es de incertidumbre administrativa y hace más necesario que nunca el papel de la Fundación, formada por antiguos y actuales colegiales, cuyo objetivo es lograr una respuesta que asegure "una gestión sostenible que dé continuidad al legado cívico, educativo y cultural acumulado a lo largo de su historia por el Colegio Mayor San Juan Evangelista".
"Yo por 'el Johnny' voy a dónde haga falta" decía Tomatito en noviembre del pasado año durante un exclusivo concierto en apoyo al colegio mayor. Él acompañó a Camarón en ese último concierto en el San Juan. Ahora también es incierta la situación del Club de Música y Jazz San Juan Evangelista, medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes en el 2011, cuyo devenir depende directamente del futuro del centro.
Pero desde la Fundación resaltan que no tiran la toalla y que de esta crisis pueden surgir oportunidades. Porque como dice Eduardo Santana, miembro del Patronato y coordinador general del Club de Música, "lo que cierra es Unicaja, 'el Johnny' sigue vivo". Los del 'Johnny', ahora más que nunca, van a coger su fusil.
Comentarios