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El Antihilo (para eso que no sabes en qué hilo poner)
Hombre, yo creo que nos vamos al extremo. Imaginaos que un crío cruza sin mirar y la madre se lleva un susto del 15, no veo el mal de darle un azote. Ese azote, en realidad, no le va a doler, pero va a ser un recordatorio de algo que hizo fatal y que no debe repetir. No es que no lo vaya a repetir por el azote, pero es un añadido porque, pese a todas las advertencias y la educación previa el crío se despistó, así que un recordatorio más. No creo que en ese caso eso exprese la resolución de un conflicto interno del adulto, en serio (igual me equivoco).
Claro que es la expresión del conflicto del adulto, el de "llevarse un susto del 15".
Es decir, aquí es el adulto el que no ha gestionado bien sus emociones y la ha pagado con el crío. Que luego lo racionalice con justificaciones de educación y demás es justo lo que dice Shape.
Hombre, yo creo que nos vamos al extremo. Imaginaos que un crío cruza sin mirar y la madre se lleva un susto del 15, no veo el mal de darle un azote. Ese azote, en realidad, no le va a doler, pero va a ser un recordatorio de algo que hizo fatal y que no debe repetir. No es que no lo vaya a repetir por el azote, pero es un añadido porque, pese a todas las advertencias y la educación previa el crío se despistó, así que un recordatorio más. No creo que en ese caso eso exprese la resolución de un conflicto interno del adulto, en serio (igual me equivoco).
Claro que es la expresión del conflicto del adulto, el de "llevarse un susto del 15".
Es decir, aquí es el adulto el que no ha gestionado bien sus emociones y la ha pagado con el crío. Que luego lo racionalice con justificaciones de educación y demás es justo lo que dice Shape.
Si de verdad quieres convencer al crío de que podría haberse hecho daño puedes explicárselo correctamente: si cruzas sin mirar, te pueden atropellar y hacerte mucho daño. Del otro modo lo único que consigues es que le pille miedo a cruzar y no al hecho de no mirar.
Si de verdad quieres convencer al crío de que podría haberse hecho daño puedes explicárselo correctamente: si cruzas sin mirar, te pueden atropellar y hacerte mucho daño. Del otro modo lo único que consigues es que le pille miedo a cruzar y no al hecho de no mirar.
Eso asumiendo que no te coja miedo a ti.
Creo que no has debido de leer todo lo que digo, y no solo lo del azote/bofetada, porque si no, no es posible que me digas eso.
El segundo caso que expongo, veo que se queda sin respuesta.
El segundo caso que expongo, veo que se queda sin respuesta.
Pero vamos a ver, cómo va a tener sentido pedagógico alguno frenar una acción violenta con otra acción violenta? El niño solo ha aprendido que la violencia tiene sentido como medio para un fin, pero que la próxima vez se tiene que asegurar de que no haya otro más fuerte cerca, nada más. Padres que pegan llevan a niños que pegan, porque en la familia se normaliza que los fuertes pegan para imponer su autoridad, ni más ni menos. Ahora, que si el padre solo es capaz de imponer su autoridad con violencia es normal que sea lo que utilice. El problema es exclusivamente del padre.
Aparte, no se pueden juzgar situaciones aisladas, las cosas no suceden aisladas.
Hace años, claudia, era totalmente normal pegar a la mujer, como sabes. La filosofía subyacente es que la mujer tenía que ser educada, que no tenía la misma racionalidad y que sus sentimientos no eran tan importantes, que el fin justificaba los medios. Con los niños aún estamos en una fase en la que hay que entender que no son posesiones de los padres, que son seres humanos con sus sentimientos y sus derechos. Los conflictos existen y hay que educar poniendo límites, pero siempre partiendo del reconocimiento de esos derechos. Algún día se entenderá. De hecho, ya se ha legislado para defender a la parte débil, igual que se legisló para defender a las mujeres en el contexto doméstico, aunque sea ámbito privado. Así que aprobar pegar a tu hijo es lo mismo que aprobar pegar a tu mujer... esto es, pasar de la ley porque bueno, me la bufa lo que diga y que sabrán ellos. Lo que piensan los maltratadores, vaya.
Mi padre me ponía fino pero a) yo tenía MUCHA guasa y b) eran otros tiempos. No le guardo ningún rencor, lo hizo como mejor podía y sabía. Me tuvo siendo un chaval al fin y al cabo.
Yo no soy de los que se escandaliza por una colleja a tiempo PERO Shape lleva razón, si necesitas darla para hacerte respetar es porque ANTES has hecho algo mal. No hay más vuelta de hoja.
En mi caso tengo una hija con 14 -que a estas alturas es más una ayuda que un problema- y un demonio de Tasmania con 4. Normalmente, curro a turnos, es la parienta la que se encarga de regañarles y es cascarrabias, constante, exigente y coherente. Lo hace bien. Yo cuando tengo que llamar la atención tengo que medirme mucho, poner tono de voz grave es para las ocasiones serias de verdad y las pocas veces que he recurrido a ello se desmoronan y se quedan desolados. Probablemente tenga mil carencias como padre pero creo que en la faceta de disciplina cumplo con buena nota.
Bien es cierto que algunos niños se merecen hostias infinitas. Véase Tessa, alias Hitler:
Es que la empatía es una cosa que se enseña, no viene de serie. Es de las cosas más difíciles de enseñar, pero mostrando tu empatía (que no quiere decir pedirle al niño que haga lo que tu quieres, sino reconocerle que entiendes sus sentimientos) y enseñándole en situaciones lo importante que es la empatía poco a poco vas moldeando. Probablemente esta niña no haya visto empatía por ningún lado en su casa.
El segundo caso que expongo, veo que se queda sin respuesta.
Pero vamos a ver, cómo va a tener sentido pedagógico alguno frenar una acción violenta con otra acción violenta? El niño solo ha aprendido que la violencia tiene sentido como medio para un fin, pero que la próxima vez se tiene que asegurar de que no haya otro más fuerte cerca, nada más. Padres que pegan llevan a niños que pegan, porque en la familia se normaliza que los fuertes pegan para imponer su autoridad, ni más ni menos. Ahora, que si el padre solo es capaz de imponer su autoridad con violencia es normal que sea lo que utilice. El problema es exclusivamente del padre.
Aparte, no se pueden juzgar situaciones aisladas, las cosas no suceden aisladas.
Hace años, claudia, era totalmente normal pegar a la mujer, como sabes. La filosofía subyacente es que la mujer tenía que ser educada, que no tenía la misma racionalidad y que sus sentimientos no eran tan importantes, que el fin justificaba los medios. Con los niños aún estamos en una fase en la que hay que entender que no son posesiones de los padres, que son seres humanos con sus sentimientos y sus derechos. Los conflictos existen y hay que educar poniendo límites, pero siempre partiendo del reconocimiento de esos derechos. Algún día se entenderá. De hecho, ya se ha legislado para defender a la parte débil, igual que se legisló para defender a las mujeres en el contexto doméstico, aunque sea ámbito privado. Así que aprobar pegar a tu hijo es lo mismo que aprobar pegar a tu mujer... esto es, pasar de la ley porque bueno, me la bufa lo que diga y que sabrán ellos. Lo que piensan los maltratadores, vaya.
Perdona, pero yo no he hablado de educar mediante hostias, creo que eso lo he dejado meridianamente claro, lo que he dicho es que en contadas ocasiones puede hacer falta recurrir a ello y no por eso sería un maltrato.
Haciendo comparaciones correctas, en vez de pegar a las mujeres, háblame de una defensa legítima, por ejemplo como en el caso en que mi padre pegó a mi primo. Es algo que harías igual con un adulto.
Ahora, no sé por qué me sueltas toda esa parrafada cuando he dejado bien claro que las tortas no son formas de educar. De verdad, es que paso de repetirme de nuevo.
Para más ejemplos, mi hermana saca mucho la mano a pasear, y los gritos, y los castigos, y mi madre y yo siempre le estamos diciendo que no son maneras de educar y que los niños están frustrados porque ella está desquiciada. El por qué es otro tema, pero, vamos, que sí, que yo precisamente necesitaba mucho que me clarificaras todo eso que me has contado.
Yo no sé si no se me lee o se pasa ampliamente de lo que manifiesto, o ambas, a saber.
El segundo caso que expongo, veo que se queda sin respuesta.
Pero vamos a ver, cómo va a tener sentido pedagógico alguno frenar una acción violenta con otra acción violenta? El niño solo ha aprendido que la violencia tiene sentido como medio para un fin, pero que la próxima vez se tiene que asegurar de que no haya otro más fuerte cerca, nada más. Padres que pegan llevan a niños que pegan, porque en la familia se normaliza que los fuertes pegan para imponer su autoridad, ni más ni menos. Ahora, que si el padre solo es capaz de imponer su autoridad con violencia es normal que sea lo que utilice. El problema es exclusivamente del padre.
Aparte, no se pueden juzgar situaciones aisladas, las cosas no suceden aisladas.
Hace años, claudia, era totalmente normal pegar a la mujer, como sabes. La filosofía subyacente es que la mujer tenía que ser educada, que no tenía la misma racionalidad y que sus sentimientos no eran tan importantes, que el fin justificaba los medios. Con los niños aún estamos en una fase en la que hay que entender que no son posesiones de los padres, que son seres humanos con sus sentimientos y sus derechos. Los conflictos existen y hay que educar poniendo límites, pero siempre partiendo del reconocimiento de esos derechos. Algún día se entenderá. De hecho, ya se ha legislado para defender a la parte débil, igual que se legisló para defender a las mujeres en el contexto doméstico, aunque sea ámbito privado. Así que aprobar pegar a tu hijo es lo mismo que aprobar pegar a tu mujer... esto es, pasar de la ley porque bueno, me la bufa lo que diga y que sabrán ellos. Lo que piensan los maltratadores, vaya.
Perdona, pero yo no he hablado de educar mediante hostias, creo que eso lo he dejado meridianamente claro, lo que he dicho es que en contadas ocasiones puede hacer falta recurrir a ello y no por eso sería un maltrato.
Haciendo comparaciones correctas, en vez de pegar a las mujeres, háblame de una defensa legítima, por ejemplo como en el caso en que mi padre pegó a mi primo. Es algo que harías igual con un adulto.
Ahora, no sé por qué me sueltas toda esa parrafada cuando he dejado bien claro que las tortas no son formas de educar. De verdad, es que paso de repetirme de nuevo.
Para más ejemplos, mi hermana saca mucho la mano a pasear, y los gritos, y los castigos, y mi madre y yo siempre le estamos diciendo que no son maneras de educar y que los niños están frustrados porque ella está desquiciada. El por qué es otro tema, pero, vamos, que sí, que yo precisamente necesitaba mucho que me clarificaras todo eso que me has contado.
Yo no sé si no se me lee o se pasa ampliamente de lo que manifiesto, o ambas, a saber.
Tienes razón, no te leí con toda la calma. Lo que no veo entonces es la comparación con un caso en el que el tío pega al sobrino en defensa de su hija. Me parece que está fuera del debate educativo. Si te refieres a que en ocasiones la violencia es necesaria, pues sí, claro que lo es: si te van a violar, si te declaran la guerra... hay muchas situaciones. Quizá esa fue una, aunque siendo un niño bastante más débil que un adulto supongo que con cogerle y separarle habría bastado, pero da igual, el tema es que no es el tema.
Si el niño tiene una rabieta que no has sabido gestionar, uno debe tragarsela y punto.
Buena manera de crear un monstruo. Si el niño tiene una rabieta y no ves claro pegarle un bofetón (que, desde luego, me parecería una medida excesiva por una simple rabieta, lo veo solo en caso de hacer daño a otros niños o cosas así) al menos castigalé sin ver la tele, sin play y sin lo que haga falta, que comprenda que no se puede ir por la vida enfureciéndote cada vez que no consigues lo que quieres. ¿Que pasará cuando ese niño crezca y su pareja no haga lo que él quiere, por ejemplo?
Claro que también le puedes explicar muy racionalmente que eso de enfurecerse cuando no se le obedece está muy feo y tal y tal, al menos pasará de estar enrabietado a descojonarse de tí, que siempre es preferible.
Por cierto, de lo que decís de los traumas y de la autoestima, no soy psicólogo, pero yo diría que es más fácil traumatizar o acabar con la autoestima de un niño (o de quien sea) con las palabras adecuadas (inadecuadas, más bien) que con castigos físicos.
Y un caso personal que me choca mucho: yo tuve una novia cuyo padre era (y seguirá siendo, si no se ha jubilado) catedrático de psicología infantil de una universidad madrileña ... pues el tío ese (si es cierto lo que ella me contaba) tanto a su hijo como a sus hijas les pegaba habitualmente cuando eran pequeños (no un cachete por haberse portado mal, sino auténticas palizas, hasta el punto de atarlos para pegarlos). No es que quiera extrapolar el comportamiento de ese tío a nadie más que a él, pero te hace dejar de creer bastante en la psicología. Por cierto, es verdad que esta chica tenía un serio problñema de autoestima, hasta el punto de que tuvo problemas de anorexia y varios intentos de suicidio.
Blackbana no ha dicho que no haya que hacer lo que tú dices, capi. A ver si distinguimos: poner límites, SI, pegar, NO. Pegar no es la única manera de poner límites.
En general, las rabietas vienen de no poner habitualmente límites y no educar al niño en que gestione su propia frustración. Los niños que más rabietas protagonizan son los que ven en la rabieta una continuación lógica de sus peticiones: si les funciona, lo seguirán usando. No son tontos. El problema para los padres es gestionar el tema a corto plazo (le doy lo que quiere y así se calla y me deja tranquilo) o a largo plazo (me mantengo firme, calmado y asertivo con el niño).
El castigo en una rabieta dependerá de la rabieta, pero en general si el niño no ve conexión entre una cosa y otra (acción-castigo) no aprenderá más que represión. No tener éxito en su rabieta es ya un castigo de por sí y una enseñanza.
La conexión habrás de explicársela tú, para que se entere de que la rabieta, además de no haber conseguido su objetivo (yo no creo que eso sea un castigo, es solo falta de premio, nada ha perdido por intentarlo y a lo mejor cuela en otra ocasión) le ha acarreado estar sin play una semana.
¿quién ha dicho que no se castigue al nano? Si tiene una rabieta, te la comes y parcheas el problema sin requerir al castigo físico. Que esto no es binario y el contexto es claramente sobre pegarle o no a al crío.
¿Y si se traumatiza por castigarlo? Me refiero a que lo importante de todo esto no es el daño físico que le haces con un cachete, sino el mental ... ¿Y si el daño mental que le haces con otro tipo de castigos es mayor que el que le haces con un castigo físico?
Pero no me contestas ¿Puede traumatizarle un castigo no físico? Y, caso de respuesta positiva ¿Entonces es lícito castigarle de alguna manera o es mejor dejarle que haga lo que le salga de los cojones?
Sí, si le torturas psicológicamente puede traumatizarse con que es el mal personificado por haber hecho una trastada. Y repito por N-ésima vez: castigarle sí, castigarle físicamente no.
Easy.
PD: Los castigos no tienen porque conllevar gritos, insultos y demás. Aunque, en realidad, también es violencia.
Claro que puedes traumatizar a un niño sin tocarlo, tal y como se puede maltratar a un adulto sin tocarlo también.
Yo lo he estado diciendo antes: nada de humillaciones. Encima es una personalidad que se está formando, con que lo que tú le transmitas le puede dejar marcado de por vida (esto es lo que a mí siempre me ha asustado de la educación).
De lo que te acabas dando cuenta es de que la educación mucha gente no la tiene asumida más que como represión, efectivamente, como algunos habéis dicho. Se trata de formar personas no de crear esperpentos y claro que genera frustraciones el abuso, sea físico o no, pero la falta de educación las genera igualmente. Ambas cosas dan origen a individuos inadaptados, incívicos e incapaces de vivir en sociedad, con todo lo que ello genera.
Shape, será como dices, será que hablo de violencia en casos necesarios, pero lo que quería decir es que sacar la mano a pasear a veces tiene justificación, pero únicamente en casos contaditos y excepcionales. Lo contrario, no puede ni debe justificarse.
¿Y si se traumatiza por castigarlo? Me refiero a que lo importante de todo esto no es el daño físico que le haces con un cachete, sino el mental ... ¿Y si el daño mental que le haces con otro tipo de castigos es mayor que el que le haces con un castigo físico?
Hombre, es que salvo que al niño le dejes minúsvalido de la hostia que le des, está claro que el impacto principal es psicológico. Que los maltratos psicológicos son mucho más sutiles que los físicos y por eso solo se pone atención a los segundos? Pues sí, así es desgraciadamente. La sutilidad no casa bien con la simplicidad que necesita, por ejemplo, una legislación. La línea entre educar marcando límites y el maltrato psicológico puede ser fina, no hay duda. Educar no es fácil, vaya, y es lógico y humano que los padres la caguen muchas veces.
Está un pelín cogido por los pelos teniendo en cuenta que por muy de izquierdas que sean en La Vida Moderna, se ríen de todo y de todos, Echenique incluido.
Todavía hay que seguir con la turra da lo del solsticio de invierno? si ya sabemos que la idea no es original, y que la fecha no es aleatoria ni tampoco una epifanía de nada.
Los haters de la navidad son cansinos hasta el infinito, casi tanto como los talinabideños, esos de la bandera del niño jesus en el balcón y la critica hacia los ateos por celebrarla.
Los haters de la navidad son cansinos hasta el infinito, casi tanto como los talinabideños, esos de la bandera del niño jesus en el balcón y la critica hacia los ateos por celebrarla.
Comentarios
Claro que es la expresión del conflicto del adulto, el de "llevarse un susto del 15".
Es decir, aquí es el adulto el que no ha gestionado bien sus emociones y la ha pagado con el crío. Que luego lo racionalice con justificaciones de educación y demás es justo lo que dice Shape.
Yo no lo veo así, ya digo.
¿Y el otro caso que comento?
Eso asumiendo que no te coja miedo a ti.
Creo que no has debido de leer todo lo que digo, y no solo lo del azote/bofetada, porque si no, no es posible que me digas eso.
El segundo caso que expongo, veo que se queda sin respuesta.
Pero vamos a ver, cómo va a tener sentido pedagógico alguno frenar una acción violenta con otra acción violenta? El niño solo ha aprendido que la violencia tiene sentido como medio para un fin, pero que la próxima vez se tiene que asegurar de que no haya otro más fuerte cerca, nada más. Padres que pegan llevan a niños que pegan, porque en la familia se normaliza que los fuertes pegan para imponer su autoridad, ni más ni menos. Ahora, que si el padre solo es capaz de imponer su autoridad con violencia es normal que sea lo que utilice. El problema es exclusivamente del padre.
Aparte, no se pueden juzgar situaciones aisladas, las cosas no suceden aisladas.
Hace años, claudia, era totalmente normal pegar a la mujer, como sabes. La filosofía subyacente es que la mujer tenía que ser educada, que no tenía la misma racionalidad y que sus sentimientos no eran tan importantes, que el fin justificaba los medios. Con los niños aún estamos en una fase en la que hay que entender que no son posesiones de los padres, que son seres humanos con sus sentimientos y sus derechos. Los conflictos existen y hay que educar poniendo límites, pero siempre partiendo del reconocimiento de esos derechos. Algún día se entenderá. De hecho, ya se ha legislado para defender a la parte débil, igual que se legisló para defender a las mujeres en el contexto doméstico, aunque sea ámbito privado. Así que aprobar pegar a tu hijo es lo mismo que aprobar pegar a tu mujer... esto es, pasar de la ley porque bueno, me la bufa lo que diga y que sabrán ellos. Lo que piensan los maltratadores, vaya.
Yo no soy de los que se escandaliza por una colleja a tiempo PERO Shape lleva razón, si necesitas darla para hacerte respetar es porque ANTES has hecho algo mal. No hay más vuelta de hoja.
En mi caso tengo una hija con 14 -que a estas alturas es más una ayuda que un problema- y un demonio de Tasmania con 4. Normalmente, curro a turnos, es la parienta la que se encarga de regañarles y es cascarrabias, constante, exigente y coherente. Lo hace bien. Yo cuando tengo que llamar la atención tengo que medirme mucho, poner tono de voz grave es para las ocasiones serias de verdad y las pocas veces que he recurrido a ello se desmoronan y se quedan desolados. Probablemente tenga mil carencias como padre pero creo que en la faceta de disciplina cumplo con buena nota.
Es que la empatía es una cosa que se enseña, no viene de serie. Es de las cosas más difíciles de enseñar, pero mostrando tu empatía (que no quiere decir pedirle al niño que haga lo que tu quieres, sino reconocerle que entiendes sus sentimientos) y enseñándole en situaciones lo importante que es la empatía poco a poco vas moldeando. Probablemente esta niña no haya visto empatía por ningún lado en su casa.
Perdona, pero yo no he hablado de educar mediante hostias, creo que eso lo he dejado meridianamente claro, lo que he dicho es que en contadas ocasiones puede hacer falta recurrir a ello y no por eso sería un maltrato.
Haciendo comparaciones correctas, en vez de pegar a las mujeres, háblame de una defensa legítima, por ejemplo como en el caso en que mi padre pegó a mi primo. Es algo que harías igual con un adulto.
Ahora, no sé por qué me sueltas toda esa parrafada cuando he dejado bien claro que las tortas no son formas de educar. De verdad, es que paso de repetirme de nuevo.
Para más ejemplos, mi hermana saca mucho la mano a pasear, y los gritos, y los castigos, y mi madre y yo siempre le estamos diciendo que no son maneras de educar y que los niños están frustrados porque ella está desquiciada. El por qué es otro tema, pero, vamos, que sí, que yo precisamente necesitaba mucho que me clarificaras todo eso que me has contado.
Yo no sé si no se me lee o se pasa ampliamente de lo que manifiesto, o ambas, a saber.
Tienes razón, no te leí con toda la calma. Lo que no veo entonces es la comparación con un caso en el que el tío pega al sobrino en defensa de su hija. Me parece que está fuera del debate educativo. Si te refieres a que en ocasiones la violencia es necesaria, pues sí, claro que lo es: si te van a violar, si te declaran la guerra... hay muchas situaciones. Quizá esa fue una, aunque siendo un niño bastante más débil que un adulto supongo que con cogerle y separarle habría bastado, pero da igual, el tema es que no es el tema.
Buena manera de crear un monstruo. Si el niño tiene una rabieta y no ves claro pegarle un bofetón (que, desde luego, me parecería una medida excesiva por una simple rabieta, lo veo solo en caso de hacer daño a otros niños o cosas así) al menos castigalé sin ver la tele, sin play y sin lo que haga falta, que comprenda que no se puede ir por la vida enfureciéndote cada vez que no consigues lo que quieres. ¿Que pasará cuando ese niño crezca y su pareja no haga lo que él quiere, por ejemplo?
Claro que también le puedes explicar muy racionalmente que eso de enfurecerse cuando no se le obedece está muy feo y tal y tal, al menos pasará de estar enrabietado a descojonarse de tí, que siempre es preferible.
Por cierto, de lo que decís de los traumas y de la autoestima, no soy psicólogo, pero yo diría que es más fácil traumatizar o acabar con la autoestima de un niño (o de quien sea) con las palabras adecuadas (inadecuadas, más bien) que con castigos físicos.
Y un caso personal que me choca mucho: yo tuve una novia cuyo padre era (y seguirá siendo, si no se ha jubilado) catedrático de psicología infantil de una universidad madrileña ... pues el tío ese (si es cierto lo que ella me contaba) tanto a su hijo como a sus hijas les pegaba habitualmente cuando eran pequeños (no un cachete por haberse portado mal, sino auténticas palizas, hasta el punto de atarlos para pegarlos). No es que quiera extrapolar el comportamiento de ese tío a nadie más que a él, pero te hace dejar de creer bastante en la psicología. Por cierto, es verdad que esta chica tenía un serio problñema de autoestima, hasta el punto de que tuvo problemas de anorexia y varios intentos de suicidio.
En general, las rabietas vienen de no poner habitualmente límites y no educar al niño en que gestione su propia frustración. Los niños que más rabietas protagonizan son los que ven en la rabieta una continuación lógica de sus peticiones: si les funciona, lo seguirán usando. No son tontos. El problema para los padres es gestionar el tema a corto plazo (le doy lo que quiere y así se calla y me deja tranquilo) o a largo plazo (me mantengo firme, calmado y asertivo con el niño).
El castigo en una rabieta dependerá de la rabieta, pero en general si el niño no ve conexión entre una cosa y otra (acción-castigo) no aprenderá más que represión. No tener éxito en su rabieta es ya un castigo de por sí y una enseñanza.
No te jode.
Easy.
PD: Los castigos no tienen porque conllevar gritos, insultos y demás. Aunque, en realidad, también es violencia.
Yo lo he estado diciendo antes: nada de humillaciones. Encima es una personalidad que se está formando, con que lo que tú le transmitas le puede dejar marcado de por vida (esto es lo que a mí siempre me ha asustado de la educación).
De lo que te acabas dando cuenta es de que la educación mucha gente no la tiene asumida más que como represión, efectivamente, como algunos habéis dicho. Se trata de formar personas no de crear esperpentos y claro que genera frustraciones el abuso, sea físico o no, pero la falta de educación las genera igualmente. Ambas cosas dan origen a individuos inadaptados, incívicos e incapaces de vivir en sociedad, con todo lo que ello genera.
Shape, será como dices, será que hablo de violencia en casos necesarios, pero lo que quería decir es que sacar la mano a pasear a veces tiene justificación, pero únicamente en casos contaditos y excepcionales. Lo contrario, no puede ni debe justificarse.
Hombre, es que salvo que al niño le dejes minúsvalido de la hostia que le des, está claro que el impacto principal es psicológico. Que los maltratos psicológicos son mucho más sutiles que los físicos y por eso solo se pone atención a los segundos? Pues sí, así es desgraciadamente. La sutilidad no casa bien con la simplicidad que necesita, por ejemplo, una legislación. La línea entre educar marcando límites y el maltrato psicológico puede ser fina, no hay duda. Educar no es fácil, vaya, y es lógico y humano que los padres la caguen muchas veces.
Y en el que damos la bienvenida a Tim Curry como nueva princesa Disney
Dios aprieta pero no ahoga
http://www.ign.com/articles/2017/12/13/movie-and-tv-show-properties-disney-could-get-from-fox
Todavía hay que seguir con la turra da lo del solsticio de invierno? si ya sabemos que la idea no es original, y que la fecha no es aleatoria ni tampoco una epifanía de nada.
Los haters de la navidad son cansinos hasta el infinito, casi tanto como los talinabideños, esos de la bandera del niño jesus en el balcón y la critica hacia los ateos por celebrarla.
¡Amén!