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Los crímenes de Ayuso
Ayuso asesinó en las residencias geriátricas de Madrid a 120.000 personas
Ante la incertidumbre, la palabra del Estado era la Biblia para mí. Por qué iba yo ahora a fiarme de mí mismo más que de ellos. La verdad siempre está en Televisión Española
Por Juan Soto Ivars
15/03/2025 - 05:00
Yo tengo amnesia, lo admito. Acabo de ver un documental sobre la pandemia en la tele pública. Dice que los muertos de residencias de Madrid son la deuda que nos queda por saldar con las administraciones. No se corresponde con lo que yo recuerdo. Cierto que han pasado cinco años y uno retiene sólo una parte de las cosas. Mi vida fue muy intensa en la pandemia.
Lo que más recuerdo es que, cuatro o cinco días después del encierro, mi mujer se disfrazó de astronauta con bolsas del Mercadona y fue a una farmacia a través de una ciudad zombi. Volvió con un predictor, se metió en el baño y cuando salió me dijo que íbamos a ser padres. La muerte fuera y la vida dentro.
Un embarazo declarado en mitad del apocalipsis es algo para contar a los nietos. Aquel día llamamos al hospital. Nos costó que nos atendieran, porque a la gente le había dado por agonizar en los pasillos. Ni tenían camas, ni equipo, ni idea precisa de cómo combatir los síntomas de la primera cepa del covid 19, la más letal. Nos dijeron: "no sabemos lo que el virus hace con los fetos, así que cuidado extremo. Aquí no vengáis".
Esta indicación médica por teléfono me aterrorizó y sesgó por completo mi actitud ante la pandemia. Viendo TVE sé que también deformó mis recuerdos. Lo cierto es que mi cabeza no funcionaba bien. En otras circunstancias, supongo que hubiera sido más escéptico ante las medidas draconianas y el absurdo de bajarse la mascarilla para comer en un restaurante y subirla si ibas a mear. Fui, en cambio, un integrista.
Ante la incertidumbre, la palabra del Estado era la Biblia para mí. Ellos tenían su comité de expertos (ejem) y yo la obligación sagrada de proteger a ese feto de los efectos misteriosos de un virus. Por qué iba yo ahora a fiarme de mí mismo más que de ellos. La verdad siempre está en Televisión Española. Debo hacer un ejercicio y desprenderme de mis falsos recuerdos.
Creo recordar que, una semana antes del confinamiento, Carmen Calvo animó a las mujeres de todas las edades a ir a la manifestación del 8 de marzo, porque les iba a la vida en ello. Tengo también la borrosa imagen de Lorenzo Milá, con el logo de Televisión Española, llamando a la calma desde Italia. Me suena que España retrasó sus medidas hasta que pasara el día de la mujer, y que luego se inventaron un "periodista experto" llamado Lacambra que nos explicó que mantener el fútbol y los conciertos y los bares abiertos para que el feminismo pudiera desfilar salvando vidas no había tenido incidencia alguna en la primera ola de contagios.
Creo recordar también que luego salió un estudio científico de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona y la Universidad de Zaragoza que cifró en 23.000 las víctimas mortales que se hubieran evitado de tomar cartas en el asunto una semana antes. Y también me suena que las mascarillas no servían porque no teníamos, y que luego eran fundamentales para evitar los contagios cuando los políticos empezaron a hacer negocio con ellas. Y que las mantuvimos más tiempo que ningún otro país europeo.
Lo que es la memoria, qué poco nos podemos fiar de esa máquina de maquillar los hechos. Me dijeron en un hospital de Barcelona al que llamé para escribir un artículo que no se podía derivar a un nonagenario con neumonía bilateral por covid a los hospitales colapsados, porque había que priorizar a los pacientes con perspectivas de supervivencia. Me mandaron también el vídeo de una residencia de ancianos en Girona, conocida ciudad del oeste de la Comunidad de Madrid, de donde salían bolsas largas en camillas durante la noche directas a un crematorio. Creí entender, preguntando por teléfono, que algunos médicos se rompían por la presión de dejar morir a tanta gente en cribados inhumanos. Recuerdo que eran médicos con un acento catalán típico de poblaciones como Parla o Getafe. Escribí entonces textos furibundos sobre los viejos abandonados de las residencias "de toda España", así que pido perdón por manipular. Pero es que me llegaban historias terribles cuando me ofrecí a publicar en este periódico necrológicas gratuitas para gente que no había podido celebrar funerales, y yo creía que no eran todos de Madrid.
Es una suerte que mis recuerdos me traicionen. Al final, para eso sirve nuestra fabulosa televisión pública: para sacarnos del error y administrar la verdad civilizadamente, como la policía administra la violencia. Todo esto que digo no sale en el documental, así que mis recuerdos se revelan como mentiras inducidas por la propaganda de ultraderecha que nos acosa y envenena.
Sentado frente al televisor, la verdad se abre camino como un rayo blanco entre las disonancias de la memoria. Mi conclusión es que hay que mandar a los líderes de la Comunidad de Madrid al Tribunal de La Haya y condenarlos por genocidio. En la pandemia murieron más de ciento veinte mil personas. Fue un crimen contra la humanidad hacinar a tanta gente en las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid.
Bueno, la situación en Madrid, en España y en el mundo, especialmente desde la pandemia, amerita este hilo. En la Comunidad de Madrid vivimos desde hace demasiado al dictado de una auténtica criminal fascista que presume orgullosa de estar en el lado correcto de la historia y que ha hecho huir a los gais a Valencia. Pero sobre todo que ha asesinado a miles de personas, como bien apunta Reyes Maroto:
Ayuso es una loca genocida al nivel de un Hitler, un Stalin o un Pol Pot.
Tengo amigos muy preocupados por esto. Uno no entiende cómo la gente no ha salido a quemar las calles después de lo ocurrido en las residencias madrileñas, y otro, que presume de feminista, y que dice que los jueces son fachas y los votantes de Ayuso subnormales, añade que ella ni siquiera está buena, que está mucho mejor la médica y madre Mónica García. Esta situación es insostenible, Madrid es el epicentro del apocalipsis facha, aquí vivimos todos horrorizados, pero espero que al menos este hilo sirva para desgranar todos y cada uno de los crímenes de... AYUSO
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Comentarios
Hasta que le sangraran los oídos.
También llama la atención que no haya habido investigación judicial habiendo muerto personas debido a una criba bajo criterios políticos y no médicos.
1.- Los protocolos no son una ley, sino una guía para saber qué hacer en un momento excepcional, de hecho se trasladaron a hospitales a unos 5.000 residentes.
2.- la situación era excepcional y no tiene sentido aplicar normas y comportamientos típicos de una situación normal.
3.- Para acusar PENALMENTE tiene que haber una correlación clara y directa entre la muerte de alguien y el culpable, lo que es imposible de demostrar en este caso.
https://www.poderjudicial.es/cgpj/es/Poder-Judicial/Tribunal-Supremo/Noticias-Judiciales/El-Tribunal-Supremo-archiva-una-denuncia-penal-contra-la-presidenta-de-la-Comunidad-de-Madrid-por-las-muertes-en-las-residencias-durante-la-pandemia-
Críticas POLÍTICAS a la gestión de Ayuso?, sin problemas, exigencias LEGALES por la gestión de Ayuso? muy complicado.
Y esto vale para casi todo, Mazon y Sánchez incluidos.
En una situación excepcional, si hay tres camas UCI y 6 pacientes que la necesitan, un médico, bajo criterios médicos, decide quién debe ocuparlas... normalmente por probabilidades de supervivencia.
Con ese protocolo no se pudo tomar este tipo de decisiones, muchas personas quedaron directamente excluidas. Y no se hubieran muerto igual, como dice Ayuso. Esas personas fueron tratadas de forma desigual respecto a otros ciudadanos bajo las mismas circunstancias excepcionales.
Y en el caso de Mazón y consejeras espero verlos algún día pagar penalmente. En el caso de las residencias de Madrid dudo mucho que la responsable directa sea Ayuso. Políticamente es desde luego responsable, penalmente me cuesta pensarlo. Como no me cuesta nada pensarlo de Mazón.
Yo es que en este caso hasta las criticas políticas me hacen dudar, sinceramente. Que podemos criticarla por las vacunas sputnik que quiso comprar, con el Zendal y relacionado con esto por la operación bicho que es un pelotazo a una amiga y como consecuencia tiene dejar morir de la forma más cruel a los ancianos pues sí, pero con los protocolos en una situación de máxima emergencia, colapso del sistema sanitario, gente muriendo pues yo no lo veo tan claro y creo que es una decisión que mucha gente podría haber tomado en esa situación.
Pd: Lo de la operación bicho es que cada vez que lo recuerdo le da náuseas.
Si haces una demanda acusando que más de 7.000 personas han muerto por los protocolos, tienes que demostrar que cada persona murió por no trasladarla y que trasladándola seguiría viva, algo imposible de demostrar en una pandemia.
Y se trasladaron más de 5.000, cuando hubo hueco, médicos y material en los hospitales.
No me gusta sacar temas individuales, pero por aclarar, en junio del 2020, con la pandemia empezando a estar controlada y con más medios en la sanidad, mi tío, entonces 91 años, en una residencia, es diagnosticado de neumonía bilateral, que pasó encerrado en la habitación de la residencia, porque el hospital de la SS se negó al traslado, en la habitación le pasaban comida y antibióticos, y todavía vivo.
La IDA estuvo metida en un loft propiedad de algún magnate inmobiliario o de Quirón y no se enteraba de la misa la media y solo decía lo que MAR le ponía en el guión.
IDA no es responsable, ¿Cómo va a serlo si no sabe juntar dos frases con sentido si no tiene pinganillo o teleprompter? Un juez de lo penal la indultaria por oligofrenia.
El padrino de Súcubo que se murió en una camilla con sólo morfina, y el muy tonto confiado en que una comunista haría todo los posible para salarle la vida; y la ahijada ni siquiera intentó trasladarlo a otra parte donde pudieran atenderlo, por pura comodidad. Ahí lo dejaron morirse solo sin atención, con la crueldad propia de los comunistas.
Puddles-Súcubo, la asesina de su padrino.
No sabe ni hablar la lerda.
Y el consejero, aunque creo que era de Ciudadanos, no creo que sea anti-PP o anti-Ayuso.
Pero vamos, si Mazón, del que la única definición que se me ocurre es hijo de la grandísima puta, se va de rositas, a la IDA habrá que darle una medalla.
https://www.elplural.com/politica/espana/andorra-nuevo-destino-hombre-ayuso-firmo-protocolos-verguenza_348376102
Pero hay más responsables.
No me has entendido. No se trata de responsabilizar por las muertes. Se trata de responsabilizar por el trato desigual en la atención en función de si el enfermo vivía en residencia o no. Cosa que no creo que sea muy legal. Obviamente una neumonía bilateral con descarte de UCI, no por criterios médicos sino protocolarios, tiene más opciones de final fatal.
Ni Madrid fue diferente al resto de España, ni España fue diferente al resto de Europa, la responsabilidad mayor fue que todos perdimos enero y febrero por una falsa superioridad sobre los chinos.
Pues el 5 de marzo la innombrable Comunidad de Madrid publicó una alerta sanitaria recomendando evitar "los lugares con aglomeración de personas, como eventos multitudinarios o medios de transporte públicos en horas punta":
https://www.comunidad.madrid/sites/default/files/doc/sanidad/covid-19_200305_medidas_de_precaucion_relacionadas_con_el_brote_causado_por_el_nuevo_coronavirus.pdf
Ese mismo día, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, se reunieron con los responsables de un congreso evangélico que iba a celebrarse en Madrid del 19 al 21 de marzo y les recomendaron suspenderlo por ser una "actividad de máximo riesgo". Sin embargo, como bien apunta Soto Ivars, no se suspendieron manifestaciones, ni mítines, ni partidos.
El argumento que dio a posteriori Fernando Simón es que al congreso evangélico, que reuniría a unas 8.000 personas, iban a acudir extranjeros, en parte de zonas de riesgo.
Pero resulta que el 7 de marzo se celebró un partido en el Wanda Metropolitano entre el Atlético de Madrid y el Sevilla al que acudieron más de 60.000 personas, incluidas varias peñas extranjeras:
Que quizá no eran países de riesgo en ese momento, pero en fin.
El partido no se celebró en un espacio cerrado, pero diría que 60.000 personas son muchas personas. Y además esa gente vino de casi toda España y parte del extranjero, con lo que el riesgo de la "movilidad" nuestras autoridades también se lo pasaron limpiamente por el forro.
O sea, que sí hubo alguna restricción (o recomendación), pero de la que nos enteramos tiempo después:
¿Cómo va ser esta descerebrada responsable de nada?
El tema es que no se prohibió lo primero porque tocaba hacer lo segundo. Esto se vió claro porque el día 9 se empezaron a tomar medidas en serio y el domingo ya se anunció el confinamiento. Que ojo, tampoco se pueden pedir responsabilidades penales, ni decir que el PSOE/Podemos infectaron a X miles de personas con COVID a propósito, pero vaya desastre armaron por politiqueos de la más baja estofa. Y recuerdo que Montero se infectó ahí y Carmen Calvo poco más y la palma. Vamos que se dieron un viajecito por la realidad bajo la demagogia de lo más estupendo.
Un saludo
La izquierda y Podemos asesinos de ancianos.
Aparte de que la manifestación del 8M fue el único evento de todos los que hubo ese fin de semana al que desde el Gobierno se animó a la gente a acudir.
Recordemos algunos momentos estelares:
Es más sencillo pensar que el gobierno español, como casi todos los gobiernos, profeministas o no, simplemente no asumieron que el COVID haría en Europa lo mismo que hizo en China.
Mera opinión, claro.
Mientras tanto Fernando Simón decía aquello de que España no iba a tener "como mucho, más allá de algún caso diagnosticado" (31 de enero) y el ministro de Sanidad, Salvador Illa, pedía "no caer en el alarmismo" (29 de febrero).
En fin, que podemos coincidir qué con la falta de información, los medios que se tenían, el desconocimiento de generalizado de la situación se tomasen decisiones médicas desafortunadas basadas en el desconocimiento y el colapso. Pero comparar lo de animar a ir al 8M con lo decisión de prohibir que se trasladase a ancianos a los hospitales es muy descarado. Pero vamos, nada me sorprende ya cuando se trata de defender a Ayuso.
Había hospitales vacíos y aburridos esperando ancianos en Madrid?.
Se traslado unos 10.000 ancianos de residencias a hospitales, se hizo cuando se pudo.
Ayer la fiscalía de Madrid ha presentado otras 9 demandas penales, es insólito pero a ver qué pasa.
Coño, ya tardaba en salir la palabra "facha", el argumento sucubil por excelencia.
Se decidió no hacer nada hasta el 9 de enero, como bien apunta Rubén.
Qué no lo sé. Acepto mi desconociendo absoluto e incapacidad de gestionar una crisis de tal magnitud en ese momento. Por eso me parece desafortunado intentar culpar a Ayuso de lo que paso con esos 7000 ancianos, porque no sé ahora y creo que nadie sabía en ese momento si había una solución mejor. Ahora bien, cuando se tomó esa decisión, era una decisión que se tomaba sabiendo que se estaba condenando a esos ancianos a morir. Una decisión terrible y dramática que se tomaba con conocimiento de lo que implicaba, no me quiero poner en la piel de esa gente en ese momento. Pero sabían lo que iba a pasar y podrían mostrar algo de compasión por esa pobre gente.
No culpa a Ayuso de los 7000 ancianos, pero sí que digo que esos protocolos existieron y se sabía lo que implicaban. Y que entre toda la variedad de acciones que podían tomar para hacer más llevadero esa decisión tan terrible decidieron no medicalizar las residencias, quitarle a ciudadanos las competencias y encargarle el plan a una amiga hija de un asesor, Encarnación Burgueño.
“Ejem, llevamos en torno a 8.600, yo ya pondría con los que me faltan unos 8.700 abueletes vistos. ¿Sabéis lo que es eso?, ¿sabéis el curro que habéis hecho? Es increíble. O sea, increíble. En una semana y poco. Una semana. Porque empezamos el viernes de la semana anterior. En una semana. Flipo colorines, tíos. Flipo colorines de lo que valéis. Joder como sigamos así nos vamos a hacer los reyes y los amos de la gestión sociosanitaria de Madrid, Comunidad Autónoma, ¿vale? Flipo. Sois geniales. Vais a hacer que mi sueño se consiga. Que es trabajar en el mundo sociosanitario. Tener mi propia empresa. Gracias. Muchísimas gracias”.